El nuevo BMW M2 será el último modelo desarrollado por la división Motorsport sin ningún tipo de asistencia eléctrica: tras él, todos los BMW M estarán electrificados en mayor o menor medida. El primer híbrido del departamento de alto rendimiento de BMW será el inminente SUV XM, cuyo sistema de propulsión también llegará al próximo M5.
Sin embargo, BMW también contará en su gama con deportivos 100% eléctricos. Aunque las versiones más prestacionales de los i4 (M50) e iX (M60) están firmadas por M, habría que señalar que no son modelos M «de pura cepa» como los M4 o X5 M, sino que pertenecen a la gama M Sport, situada a caballo entre los BMW estándar y los «verdaderos» M, como ocurre con los M440i o X5 M50i.
Dado que BMW aspira a que para 2030 el 50% de sus ventas a nivel mundial sean eléctricas, tarde o temprano también llegará un M completamente eléctrico a la oferta del fabricante bávaro. Todo apunta a que el primero en dar el paso será el legendario M3; no en vano, la próxima generación del Serie 3, prevista para 2025, será 100% eléctrica gracias al uso de la plataforma Neue Klasse.
Frank van Meel, jefe de BMW M, ha revelado algunas de la claves de esta transformación. «La historia del M3 es eterna. Cada vez que cambiamos su motor, de cuatro cilindros a seis cilindros a ocho cilindros a seis cilindros con turbocompresor, la historia continúa. Tal vez se vuelva eléctrico, pero si lo hace, siempre será un M3″.
BMW M quiere aligerar sus coches eléctricos
«Cualquiera que sea el sistema de propulsión, siempre deberías poder conducir nuestros automóviles y saber que son modelos M. Hemos resistido la prueba del tiempo durante 50 años y seguiremos haciéndolo. Me encantaría ver Ms electrificados en el futuro, híbridos y puramente eléctricos, pero si los traemos, serán tan innovadoras que dirás: ‘Esto es una locura, no lo vi venir’.
Acabamos de hablar con los clientes y la respuesta es que al 90-95 % no le importa qué dirección tomemos con el sistema de propulsión. Solo quieren un automóvil M. Sí, algunos dicen que si no hacemos V8 se irán, pero está bien: lo respeto». Van Meel afirma que las prioridades a la hora de desarrollar un BMW M 100% eléctrico son reducir el peso y mantener su característico dinamismo.
«Solo tenemos que seguir invirtiendo en tecnología de aligeramiento. Ya producimos mucho carbono. Pero los eléctricos tienen algunas ventajas. Se puede eliminar parte del aislamiento acústico, por ejemplo, y tener el peso de la batería tan bajo es interesante para los ingenieros. Eso te permite ablandar las suspensiones y aún así no tener balanceo. Lo que realmente les gusta a los ingenieros es que una vez que obtienes componentes electrificados en tu sistema de transmisión, el control del par y de la potencia es mucho mejor, más rápido y más fácil que en un motor de combustión».
Fuente | Autocar
