Hace unas semanas, Elon Musk anunciaba que el desarrollo de la Cybertruck había terminado, y que su producción arrancaría a mediados del próximo año. Ahora, nuevas informaciones vuelven a retrasar el lanzamiento de la camioneta eléctrica hasta finales de 2023.
Así lo indica Reuters, que citando fuentes de la compañía ha indicado que los planes volverán a retrasarse ligeramente, y no será hasta finales del próximo año cuando comience la producción y las primeras entregas.
Pero esto no está del todo asegurado. Hay un problema y este no tiene que ver con el diseño de la Cybertruck, o la capacidad de producción de la planta de Texas. El principal problema son las baterías.
Y es que este modelo ha sido diseñado para acoger en su interior las nuevas celdas 4680 de Tesla. Un formato de mayor densidad energética que también está viviendo su propio infierno de producción. Una capacidad muy limitada que no asegura tener el suministro necesario para atender la producción del vehículo.
Un aspecto que supondrá que o Tesla acelera la producción de este tipo de baterías, o rediseña el pack para poder echar mano al menos en esta primera fase de las celdas 2170 actuales.
Otro problema es que de momento, Tesla no ha presentado el diseño definitivo, ni las características, ni ha confirmado el precio que tendrá cada configuración. Y es que desde su presentación en 2019, las cosas han cambiado bastante con una crisis de componentes y energética, que ha disparado los costes de la producción de vehículos.
Algo que choca con el objetivo inicial de lanzar una versión básica desde 40.000 dólares, que claramente será imposible de lograr a corto plazo.
El último «problema» es que la temprana apertura de pedidos ha provocado que la lista de espera para hacerse con una unidad se haya disparado. Elon Musk ha indicado recientemente que había suficientes pedidos para cubrir la producción de tres años. Por supuesto, como los calendarios, las listas de espera también hay que interpretarlas por los cálculos «elonianos». Pero es algo que puede desanimar a muchos usuarios, que en la actualidad ya cuentan con otras alternativas en el mercado.
Pero está claro que Tesla necesita lanzar un modelo que se situará en uno de los segmentos más populares y rentables en Estados Unidos. Un vehículo que será un anuncio sobre ruedas ya que se podrá distinguir a kilómetros por su diseño diferente. Una propuesta que puede cubrir el hueco que los analistas indican que dejará en los pedidos la actual crisis mundial, que reducirá unas ventas que una nueva propuesta como esta puede ayudar a rellenar.
