La demanda europea impulsa las exportaciones de coches eléctricos chinos
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Publicado: 30/12/2022 10:53
El pasado mes de noviembre, las exportaciones de coches eléctricos de China se duplicaron hasta alcanzar un récord absoluto. Esto se ha debido principalmente a que muchos fabricantes occidentales han tomado la decisión de producir sus nuevos vehículos en el país asiático, los cuales luego importan al mercado europeo.
A pesar de que algunos expertos señalan que este movimiento se debe a la limitada capacidad de producción del viejo continente (China actualmente controla gran parte de la cadena de suministro de la industria de las baterías), posiblemente también esté motivado por los bajos costes laborales. Los mayores importadores han sido Bélgica y Reino Unido, que recibieron casi el 70% de los envíos.
El mes pasado, las exportaciones de vehículos eléctricos de China alcanzaron un valor de 3.200 millones de dólares, un 165% más que el año pasado. Empresas como BMW o Renault ya ensamblan modelos eléctricos en China para después venderlos en Europa, mientras que otras como Volkswagen comenzarán a hacerlo muy pronto.
Por otro lado, tampoco podemos olvidarnos de Tesla, que exportó 37.000 automóviles desde Giga Shanghái el mes pasado. Con todo, es de esperar que la actual dependencia de esta planta se vaya reduciendo paulatinamente, pues el output de Giga Berlín está aumentando con rapidez (debería alcanzar las 6.000 unidades semanales a corto plazo).
Las marcas chinas comienzan su conquista del mercado europeo
En paralelo, la llegada a nuestro mercado de una auténtica oleada de marcas chinas también ha jugado un papel fundamental en esta tendencia al alza. Si bien firmas como BYD, NIO o XPeng todavía juegan un papel minoritario en el panorama europeo, MG (perteneciente al gigante SAIC) está logrando un éxito de ventas sin precedentes.
Aunque algunas compañías chinas planean levantar fábricas en suelo europeo (este es el caso de BYD, Chery, Great Wall y NIO, entre otras), a corto y medio plazo las importaciones deberían seguir aumentando, algo que ha encendido la luz de alarma en países como Francia.
El presidente francés, Emmanuel Macron, declaraba hace apenas unas semanas que Europa está demasiado abierta a la industria extranjera. El mandatario defendió la necesidad de proteger a los grupos autóctonos, pues la cada vez mayor competitividad de China podría poner en riesgo numerosos puestos de trabajo.
«Puede que sea el momento de reservar las ayudas a los coches eléctricos producidos en territorio europeo o a vehículos que cumplan estricta y rigurosamente con los nuevos estándares ambientales. Necesitamos jugar con las mismas reglas si queremos defender nuestras industrias, nuestros trabajos y nuestra tecnología. Creo que es hora de que comencemos a pensar en esta idea en Europa», afirmaba recientemente Bruno Le Maire, ministro de Finanzas francés.
Fuente | Automotive News Europe