La industria europea está en apuros. El auge de Tesla y el rápido desembarco de las marcas chinas ha pillado desprevenidos a los fabricantes autóctonos, que no pueden competir ni por rapidez ni por costes contra estos nuevos rivales especializados en la electromovilidad. Sin embargo, cuentan con la ventaja de llevar décadas operando en un mercado que conocen como la palma de su mano.
El tipo de automóvil más popular entre los clientes europeos es un utilitario (segmento B) de aproximadamente 4 metros de largo, un nicho que los tres principales grupos del viejo continente (Renault, Stellantis y Volkswagen) dominan a la perfección. Por ello, sus próximos coches eléctricos de acceso se encuadrarán en esta categoría.
Además, también planean aprovechar su legado histórico (del que carecen los nuevos jugadores), apelando a la nostalgia de los compradores para asegurarse el éxito comercial. Con esta idea en mente nacerán entre 2024 y 2025 los nuevos FIAT Panda, Renault R5 y Volkswagen ID. Golf, basados respectivamente en los prototipos FIAT Concept Centoventi, Renault 5 Prototype y Volkswagen ID. 2all concept.
Los tres tendrán unas dimensiones muy similares, unas tarifas equivalentes (menos de 25.000 euros antes de ayudas), serán de tracción delantera y estarán bautizados en honor a algunos de los superventas más recordados por el público europeo.
Renault, Stellantis y Volkswagen explotarán su legado histórico
Es interesante señalar que tanto el Panda como el Golf cambiarán de categoría en sus próximas generaciones. El primero siempre ha sido uno de los urbanos más grandes del segmento A y el segundo uno de los compactos más pequeños del segmento C, por lo que sus respectivos cambios de tamaño no resultarán demasiado dramáticos.
El FIAT Panda eléctrico, que verá la luz en 2024, se caracterizará por contar con una estética de tipo crossover. Se fabricará en Kragujevac (Serbia), donde compartirá línea de producción con el próximo Citroën ë-C3. Ambos se asentarán sobre una versión simplificada de la plataforma eCMP de Stellantis. En sus versiones más capaces, rondará los 400 km WLTP de autonomía.
El Renault R5 también se pondrá a la venta el año que viene. Ensamblado en Douai (Francia), el pequeño galo será el encargado de estrenar la plataforma CMF-BEV de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi. Lucirá un diseño marcadamente retro inspirado en el R5 original (1972-1984), y ofrecerá un alcance máximo de 450 km WLTP.
El Volkswagen ID. Golf será el último en llegar, pues se hará esperar hasta mediados de 2025. Su aspecto será bastante sobrio y continuista, con numerosos guiños a sus predecesores con motor de combustión interna. Basado en la plataforma MEB Entry, este espacioso modelo se hará en Martorell (España). Al igual que el R5, homologará unos 450 km WLTP en sus variantes más costosas.
