Ford, GM, Stellantis y Volkswagen se enfrentarán a multas multimillonarias en Estados Unidos debido al endurecimiento de los estándares de consumo de combustible
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Publicado: 03/10/2023 15:33
El gobierno de Estados Unidos está estudiando endurecer los estándares de consumo de combustible de cara al año 2032, un movimiento que podría costarle mucho dinero a grupos como Ford, General Motors, Stellantis o Volkswagen, que se podrían enfrentar a multas multimillonarias.
El nivel de las sanciones contempladas es descrito como «alarmante» por el Consejo Estadounidense de Política Automovilística, que representa a Ford, General Motors y Stellantis, matriz de Chrysler. La firma del óvalo azul se enfrentaría a una sanción de 1.000 millones de dólares, cifra que palidece frente a los 3.000 millones de Stellantis y los 6.500 millones de General Motors.
Volkswagen por su parte sería el fabricante extranjero más castigado por esta medida, teniendo que pagar más de 1.000 millones de dólares. Según explica un representante de General Motors, la cuota del 67% que deberán tener para entonces los modelos eléctricos no será suficiente para cumplir con la nueva normativa.
Esto se une a los problemas que ya están teniendo los tres grandes fabricantes de Detroit con el sindicato UAW (United Auto Workers), que lleva varias semanas manteniendo una huelga para reclamar salarios más altos, semanas laborales más cortas y garantías de que los empleos se mantendrán tras la transición a la movilidad eléctrica.
La industria estadounidense atraviesa un momento crítico
Elon Musk, CEO de Tesla, ha llegado a afirmar que, de aceptar las exigencias de los trabajadores, Ford, General Motors y Stellantis podrían incluso quebrar. En los últimos años, Tesla ha estado en el punto de mira por perseguir activamente cualquier conato de sindicalismo en sus plantas estadounidenses y por sus enfrentamientos con IG Metall en Alemania.
«Quieren un aumento salarial del 40% y una semana laboral de 32 horas. Una forma segura de llevar a GM, Ford y Chrysler a la quiebra por la vía rápida». A principios de año, un grupo de 25 empleados de su gigafábrica en Buffalo anunció su intención de sindicarse con el apoyo de Workers United, a lo que Tesla respondió despidiendo a 30 trabajadores, la mayoría ajenos al movimiento sindical.
El expresidente Donald Trump, actual favorito para convertirse en el candidato del Partido Republicano en las elecciones de 2024, señalaba hace tan solo unos días que dará igual si el UAW llega a un acuerdo con los fabricantes, ya que el cambio a los vehículos eléctricos hará que los empleos de muchos trabajadores queden obsoletos. «No importa lo más mínimo lo que reciban porque en dos años todos se quedarán sin negocio. No importa lo que obtengan en las próximas dos, tres o cinco semanas. Van a cerrar sus puertas y van a construir esos automóviles en China y otros lugares».
Fuente | manager magazin