La startup israelí Storedot ha confirmado la buena marcha de sus trabajos con sus baterías con ánodo de silicio dominante, que llegarán este año al mercado en su primera generación. Una generación que permitirá recuperar 160 km de autonomía en 5 minutos. Pero la empresa ha confirmado que la siguiente etapa, que reducirá el tiempo a 4 minutos, se ha acelerado y llegará antes de lo previsto.
La cuestión es que los coches eléctricos logran cargar sus baterías cada vez más rápido. La expansión de las redes ultrarrápidas, con potencias más allá de los 300 kW, acercan cada vez más los tiempos de carga al repostaje de los modelos con motor de combustión. Pero para lograr sacar el máximo partido, hacen falta baterías capaces de afrontar potencias incluso más elevadas.
Es el caso de las baterías Qilin de CATL, que ya están siendo instaladas en diferentes coches eléctricos chinos, y que cuentan con una tasa de carga de 4C. Esto supone poder acceder a potencias de hasta 400 kW.
160 km de autonomía en 4 minutos
Ahora, Storedot ha confirmado que la segunda generación de sus celdas XFC adelantarán ligeramente su calendario. Una química que permitirá recuperar 160 km en 4 minutos, lo que se traduce en una mejora del 10% respecto a la anterior versión, y supondrá que un coche eléctrico medio podrá llegar al 80% de su carga en apenas 10 minutos.
Storedot ha indicado que la producción comenzará un año antes de lo previsto, siendo 2026 ahora el objetivo para empezar a entregar celdas a sus socios.
Una de las claves será su composición semi-sólida, que le permitirán disfrutar de una densidad energética elevada, estimando la compañía una cifra de unos 340 Wh/kg, superando de largo a las celdas LFP, y las NCM.
Según Doron Myersdorf, director general de StoreDot, esta nueva y revolucionaria batería debería también ofrecer una larga vida útil, ya que la compañía anuncia que ha logrado alcanzar 1.000 ciclos de carga/descarga consecutivos en los prototipos, que se mejorará en el producto final.
Algo que allana el camino para la siguiente generación, 100in3, que se esperaba para 2028, y que contará con una densidad energética de 450 Wh/kg, y capacidad para completar ese proceso, 160 km de autonomía en apenas 3 minutos, y que permitirá reducir todavía más el proceso de carga hasta el 80%, que con estas cifras, se colocarían en torno a los 8 minutos.
Casi el tiempo que le lleva a un conductor de un modelo diésel o gasolina repostar su coche, y entrar a pagar en la estación de servicio.
