Este Tesla Model 3 ha pasado de los 300.000 km con un 13% de degradación de batería y las pastillas de freno originales
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Publicado: 05/08/2024 16:15
Según van pasando los años, podemos ver más datos del comportamiento de los coches eléctricos con una importante cantidad de kilómetros a su espalda, especialmente pensando en su batería. Es el caso de este Tesla Model 3 Performance, que ha sido analizado después de recorrer más de 300.000 km en seis años.
Y es que el miedo al rendimiento de la batería es uno de los principales argumentos de muchos críticos que han interiorizado lo de que hay que cambiar la batería cada cinco años. Algo que la realidad está demostrando no ser cierto.
En esta ocasión un propietario ha compartido la experiencia a los mandos de un Tesla Model 3 Performance de primera generación. Uno de los primeros en llegar al mercado que ya acumula 200.000 millas (321.868 km).
Según el propietario, una de las cuestiones más llamativas es que la degradación de la batería ha sido más acusada en los primeros 120.000 km, cuando ha notado un descenso más importante en la pérdida de capacidad.
En este aspecto, destacar que este propietario en concreto hace unas recargas exclusivamente en los Supercargadores, y llevando el nivel de carga hasta el 95 o 100%. Un detalle que nos indica de nuevo que la carga rápida realmente no afecta a la vida útil.
Y es que los datos que maneja el propietario, indican que en una sesión completa el coche puede aceptar hasta 66 kWh. Algo que supondría una pérdida de capacidad del 12%. Aplicado a su autonomía EPA, esto supondría pasar de los 498 km a los 434 km homologados.
Después de este tiempo, el coche mantiene su sistema de motor y baterías originales, y todavía no ha cambiado las pastillas de freno ni el líquido de frenos. Sin embargo, si tendrá que llevar a revisar el sistema de climatización, que ya no enfría el coche como cuando era nuevo.
Entre los problemas destacan uno de los problemas crónicos de la primera generación con el ruido en los brazos de suspensión, operación realizada después de 100.000 kilómetros. También ha tenido que visitar el servicio técnico para reparar el hardware de carga rápida, posiblemente por uso elevado de la misma.
La conclusión es que, incluso esta primera generación, los sistemas de motores y baterías del Model 3 están demostrando su resistencia al paso de los años y los ciclos de carga y descarga, incluso cuando son sometidos a constantes cargas rápidas.
Un Model 3 que podrá continuar dando servicio a su propietario muchos años más, y salvo imprevisto, mantendrá buena parte de su autonomía original después de 10 o 15 años.