Esta batería puede recargar coches eléctricos a 240 kW incluso sin suministro de la red eléctrica
Volvo ha presentado el sistema PU500, una estación de carga móvil con batería de 500 kWh y salida de 240 kW. Permite cargar hasta 20 coches eléctricos al día sin conexión directa a la red. Es una solución versátil para zonas remotas, apagones o catástrofes.
Muchos se preguntan cómo será posible ofrecer recarga ultrarrápida incluso en zonas con una infraestructura deficiente o cuando la red esté saturada. La respuesta la ofrece la tecnología, con soluciones como este sistema desarrollado por Volvo, que propone una alternativa ya conocida —un cargador con batería integrada— pero que da un paso más allá en rendimiento.
Se trata de una estación de carga con batería incorporada. Esta alternativa, denominada Sistema de Almacenamiento de Energía de Batería PU500, cuenta con una salida de carga de hasta 240 kW y una capacidad total de 500 kWh.
Según Volvo, este sistema puede proporcionar respaldo eléctrico en diversas situaciones: desde la carga de vehículos, gracias a su conector CCS Combo 2, hasta el suministro energético para viviendas, empresas, obras de construcción o zonas afectadas por desastres naturales, mediante sus cuatro salidas industriales y dos salidas schuko.
Volvo PU500
«Con un cargador CCS2 integrado, el PU500 está diseñado para funcionar con todos los equipos eléctricos del mercado, independientemente de la empresa que los fabrique», afirmó Niklas Thulin, gerente de sistemas estacionarios de Volvo Energy. «Esto garantiza que cualquier dispositivo, incluidos los coches eléctricos, pueda alimentarse, lo que aumenta considerablemente la flexibilidad de nuestro producto».
Una de las características más destacadas del sistema es su capacidad para ofrecer carga ultrarrápida —hasta 240 kW— incluso sin estar conectado a la red eléctrica, por ejemplo, durante un apagón. Mientras su batería conserve carga, la estación puede seguir funcionando, con capacidad suficiente para ofrecer 25 kWh a 20 vehículos por jornada.
También puede reducir el impacto de la carga ultrarrápida en la red local, al recargar su batería a baja potencia entre sesión y sesión. De este modo, es la batería la que soporta la alta demanda energética durante la carga, lo que permite desplegar puntos de recarga rápidos incluso en zonas donde la red eléctrica es limitada.
Fuente | Volvo
