
China acelera hacia los camiones eléctricos y hunde la demanda del diésel
China ya desplaza más de un millón de barriles diarios de petróleo gracias a su flota eléctrica. La electrificación del transporte, especialmente de los camiones, está afectando de forma directa a la demanda de diésel y gasolina. Las implicaciones para las refinerías y los mercados globales podrían ser profundas

La transformación del transporte en China ya no es cosa exclusiva del coche eléctrico. Los datos más recientes muestran que los camiones eléctricos, especialmente los modelos ligeros y pesados, está ganando protagonismo de forma acelerada, lo que ya está teniendo un impacto directo en la demanda de petróleo del país. Actualmente, se estima que la flota de vehículos eléctricos en china está desplazando más de un millón de barriles de petróleo al día, una cifra que podría aumentar en otros 600.000 barriles durante el próximo año.
Esta evolución no solo es el reflejo del avance tecnológico, sino de un cambio estructural en el consumo energético del gigante asiático. A pesar de que las refinerías chinas mantienen una capacidad de procesamiento elevada, la producción de diésel y gasolina se ha reducido de forma significativa. La caída en la demanda de diésel es especialmente notable: de 4,7 millones de barriles diarios en abril de 2023 a solo 4 millones en abril de 2025.
Detrás de esta tendencia hay tres grandes causas: la desaceleración del sector inmobiliario, el auge del transporte por camiones alimentados con gas natural licuado (GNL), y sobre todo, la electrificación del transporte. El coste operativo cada vez más competitivo de los camiones eléctricos frente al diésel o GNL ha acelerado su adopción, con cifras que hablan por sí solas. Solo en 2024 se vendieron 256.000 camiones eléctricos ligeros, un aumento del 25% respecto al año anterior. Mientras tanto, los camiones pesados eléctricos, tradicionalmente dominados por el diésel, ya representan cerca del 9% de las ventas anuales.

Uno de los factores clave para que los camiones pesados eléctricos ganen cuota es la tecnología de intercambio de baterías, con gigantes como CATL apostando por el formato. Este sistema permite superar los largos tiempos de recarga y ayuda a equilibrar la carga de la red eléctrica. Modelos con baterías de más de 1.100 kWh, como los desarrollados por SANY, requieren más energía que el consumo diario de 140 hogares. El reto ahora es expandir una red de estaciones de recarga y puntos de intercambio que permitan sostener esta revolución.
La electrificación también tiene implicaciones para los mercados globales. Mientras empresas como BYD exportan vehículos eléctricos al extranjero, la demanda de petróleo se ve presionada a la baja. La combinación de ventas de vehículos, eficiencia energética y datos de carga eléctrica sugiere que el desplazamiento del petróleo está aumentando rápidamente. Solo en mayo de 2025, el uso de energía para cargar vehículos eléctricos superó los 383 millones de kWh diarios, una cantidad equivalente a más de 1,1 millones de barriles de petróleo.
El avance de esta tendencia podría llevar a una reducción estructural en las importaciones de crudo por parte de China y un aumento de las exportaciones de productos refinados. Las refinerías, especialmente las independientes, podrían ajustar su producción hacia productos más demandados en el extranjero o enfocados en la petroquímica. La electrificación del transporte, liderada por el segmento de los camiones, marca una nueva etapa en la transformación energética global.
Fuente | RG