Hace unas semanas que el grupo chino Wanxiang se ha hecho con el control de Fisker. Durante este tiempo, el fabricante norteamericano ha recuperado la respiración asistida, y ha comenzado a mostrar signos de que es posible su reanimación.
Gracias a una inyección de 4 millones de dólares, Fisker ha recuperado elementos como su página web. Se trata de una primera parte de una serie de créditos que entre otras cosas, permitirán atender las necesidades más urgentes, como la atención en garantía a los dueños del Karma.
Precisamente las garantías han sido uno de los temas más comentados por los propietarios del eléctrico con extensor de autonomía. Se especulaba con que el nuevo propietario podría dejar de lado las reclamaciones en curso, amparado por la ley que le exime de ello. Pero a pesar de esto, el grupo chino ha querido hacer un guiño a los poco más de 2.000 usuarios, ofreciendo una cobertura que atenderá problemas con un coste máximo de 2.000 dólares.
Pero los desafío para Wanxiang son muchos. Las deudas que Fisker ha dejado a su paso son enormes. Se estima que entre todos los acreedores y accionistas, la suma alcanza los 985 millones de dólares. Más de 600 casos se han presentado reclamando diferentes cantidades, unas deudas que pueden ser el principal obstáculo para la recuperación de los planes de Fisker.
Si lo logran, Wanxiang tendrá a su disposición una fábrica en el estado de Delaware. En esta pretenden llevar adelante la fabricación del Karma, que sería trasladada desde Finlandia. Las baterías serían producidas en China, lo que dará como resultado un vehículo mucho más económico de producir.
Pero el gran desafío es el Atlantic. Un modelo de acceso, que mantendrá el sistema de propulsión eléctrico con extensor, pero con la mitad de precio que el Karma, y un tamaño algo más compacto. La pregunta es el cuando. Según los responsables de Wanxiang, no será como pronto hasta dentro de dos años. Un tiempo donde Fisker necesitará poner todo en orden, para intentar de nuevo regresar al mercado con todas las garantías.
Vía | Autobloggreen