Curioso giro de los acontecimientos que ha vivido el deportivo eléctrico Detroit Electric. El que parece destinado a ocupar el espacio dejado por el Tesla Roadster, finalmente no será fabricado en Detroit, y llevará su producción a tierras europeas, concretamente a Holanda.
Según el presidente de la empresa, esto se debe a que desde un principio había planes de realizar la producción lo más cerca posible de los suministros y de los compradores. Esto parece que ha desviado la producción de la capital del motor americana, a tierras holandesas.
Como recordamos, el Detroit Electric es un proyecto puesto en marcha por un grupo de ex-ingenieros de Lotus. La idea era devolver a la vida a un fabricante que hace más de 70 años ya había fabricado coches eléctricos, pero que con el empuje del motor de combustión, terminó por cerrar las puertas.
La producción inicial será de 2.500 unidades, curiosamente las mismas que en su momento ha logrado alcanzar el Tesla Roadster. Al igual que esta, usarán como base la plataforma del Lotus Elise, dotado de un cuerpo fabricado en fibra de carbono que le permite contar con un peso de apenas 1.070 kilos.
El SP:01 llevará instalado un motor eléctrico con una potencia máxima de 150 kW (204 CV). El par motor es de 225 Nm. En total el DE dispone de una relación peso/potencia de 3 kW por kilo. Una cifra que a pesar de su menor potencia respecto al Tesla Roadster, le permitirá alcanzar los 100 km/h en 3.7 segundos, con una velocidad máxima de 249 km/h.
La energía procederá de un pack de baterías de litio con 37 kWh de capacidad, suficientes para recorrer entre 222 kilómetros y los 300 kilómetros, según los diferentes estándares de medición. Una cifra por supuesto, se verá recortada de forma significativa si queremos sacarle partido a la potencia de su motor.
En cuanto al precio, las primeras 999 unidades saldrán en Estados Unidos por unos 135.000 dólares, estando el precio e Europa todavía pendiente de confirmación. Un coste elevado para un modelo que puede jugar la papeleta de la exclusividad, y que podría ser el anticipo de proyectos mucho más interesantes.
Vía | DN
