IBIL estrena un punto de recarga para coches eléctricos en Pozuelo de Alarcón
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Publicado: 23/12/2014 11:27
El gestor de carga IBIL ha puesto en marcha un nuevo punto de recarga para coches eléctricos en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón.
Con este punto IBIL continúa su expansión por el territorio de la mano de una pequeña pero funcional estación, donde dos coches podrán recargar de forma simultánea sus baterías a una potencia máxima de 22 kW. Una energía que además cuenta con el certificado de 100% renovable.
Situado en el número 2 de la Calle San Juan de Cruz, con este nuevo punto IBIL amplía la presencia en la Comunidad de Madrid, donde ya cuenta con puntos en las calles de la capital gracias al convenio firmado con el Ayuntamiento de Madrid y con la Empresa Municipal de Transportes (EMT), y con puntos de recarga rápida en varios municipios. Además, IBIL participa en el proyecto FREVUE (Freight Electric Vehicles in Urban Europe: Vehículos Eléctricos de Mercancías en la Europa Urbana) en la recarga de los vehículos eléctricos del centro logístico de Legazpi.
Para poder utilizar este punto, los interesados pueden solicitar la tarjeta prepago IBILcard en las Oficinas de Atención al Ciudadano, en la web www.ibil.es/ibilcard o llamando al 902 540 810. El importe inicial de la tarjeta es de 10 euros, que incluye el coste de la tarjeta de dos euros y ocho de saldo para la recarga. A partir de su activación se puede incrementar el saldo de la tarjeta en múltiplos de 5 euros.
Ibil cuenta con la red de recarga rápida más amplia de todo el Estado, con un total de 19 estaciones. La carga rápida reduce los tiempos de recarga a menos de 30 minutos, frente a las varias horas de la carga normal nocturna. Los equipos instalados tienen una potencia de 50 kW y realizan la recarga mediante el protocolo CHAdeMo.
El objetivo de Ibil es que estos puntos, situados estratégicamente, en estaciones de servicio del grupo Repsol, impulsen las redes existentes y ofrezcan a los clientes de vehículos eléctricos una mayor autonomía y flexibilidad.
Fuente | IBIL