Una de las principales diferencias entre el Renault ZOE y el Nissan LEAF, es que mientras el ZOE es capaz de recargar en corriente alterna a casi cualquier potencia imaginable, en monofásica o trifásica entre 1,6 y 43 kW, el LEAF cuenta con un rango de posibilidades mucho menor.
El LEAF puede cargar en corriente alterna exclusivamente monofásica hasta 6,6 kw, y eso si no tenemos el Visia, la versión de acceso que está limitado a cargar a un máximo 3,6 kW y 16 Ah. Para potencias superiores a 6,6 kw estamos obligados a cargar en corriente continua, también llamado Modo 4, mediante el protocolo CHAdeMO, hasta un máximo de 50 kw de potencia.
Esto deja a un lado la recarga acelerada que en el caso del ZOE alcanza los 22 kW, un formato de carga relativamente común y sencillo que permite recuperar la autonomía del ZOE de una forma bastante rápida, en una hora aproximadamente, frente a las casi cuatro horas que necesitaría el Leaf a 6.6 kW. La carga en alterna a 22 kW también supone una importante reducción del coste de la instalación y de la potencia contratada frente a los puntos CHAdeMO de 50 kW.
[blocktext align=»left»]Con este cargador podemos recargar la batería del Nissan LEAF en menos de una hora, y con un coste menor que un punto de 50 kW[/blocktext]Pero ahora Siemens ha presentado una estación de recarga de 24 kW. Se trata de un cargador compacto, pensado principalmente para aquellas empresas que tengan una flota de coches eléctricos, y necesiten una potencia de recarga que al mismo tiempo que ágil, no suponga un esfuerzo tan elevado en cuanto a costes de instalación y mantenimiento respecto a las estaciones de 50 kW. Sus medidas (1000 x 360 x 500 mm) y su peso de solo 60 kilogramos lo convierten en un cargador que podremos alojar casi en cualquier lugar.
Una de las peculiaridades de este cargador es que podrá ser alimentado desde una toma monofásica de 111 amperios a 230V , o desde una toma trifásica de 37 amperios a 400Vac. Una flexibilidad que permite al LEAF, u otros coches equipados con toma CHAdeMO, adaptarse a un arco de clientes bastante elevado. Existirá también una versión con el cable CCS, el formato estándar Modo 4 en Europa que usan los modelos europeos como BMW y Volkswagen.
Falta por conocer un precio que se estima estará entre los 5.000 y los 10.000 euros. Una estación de recarga que abre nuevas posibilidades a las flotas, que podrán recargar sus coches con cierta velocidad, pero sin el enorme esfuerzo de los puntos de recarga rápida.
Como curiosidad decir que en España ahora mismo no podría venderse esta estación por la famosa ITC-BT-52, que obliga a añadir una toma del tipo combo 2, de conformidad con la norma EN 62196-3.
Vía | Transportevolved
