Después de un largo proceso, por fin de ha hecho oficial el acuerdo entre Renault y Dongfeng Motors, para levantar una fábrica en suelo chino desde donde fabricar coches eléctricos para el mercado local mediante la marca Dongfeng Renault Automotive Company(DRAC).
El primer fruto de esta unión será un modelo que se usará la plataforma del Renault Fluece ZE, y que como decimos estará destinado exclusivamente al mercado chino.
En total se invertirán más de 900 millones de euros para poner en marcha esta interesante iniciativa que permitirá a Renault acceder a uno de los mercados que más crece en cuanto a ventas de coches eléctricos, y que cuenta con un fuerte respaldo por parte de un gobierno que ha puesto en marcha una importante batería de ayudas e incentivos para aumentar las ventas de coches eléctricos.
La fecha de lanzamiento de este primer modelo se ha estipulado para 2017. Una fecha muy importante para el grupo francés, ya que supondrá la llegada de la segunda generación de baterías que deberían llevar las matriculaciones de sus modelos eléctricos a un nuevo nivel.
Una economía de escala de la que se beneficiarán todos los usuarios, que tendrán a su disposición coches con cada vez más autonomía, al mismo tiempo que sus precios se ven reducidos paulatinamente. Una ecuación que necesita una fuerte demanda de China para conseguir alcanzar una velocidad de crucero.
Fuente | Renault
