Alguna vez hemos hablado de David Noland, redactor de GreenCarReports y propietario de un Tesla Model S. Dada su condición, muchas veces escribe sobre sus experiencias personales con la berlina de Tesla. Con la cantidad de elogios que suele recibir el coche de la marca californiana, esta vez le toca la otra vertiente. David Noland nos cuenta las que para él son los puntos donde el Model S debe mejorar.
No tiene rueda de repuesto
Pinchar con un Model S puede ser un verdadero quebradero de cabeza. Es cierto que cada vez menos conductores deciden cambiar la rueda en caso de pinchar, y optan por llamar directamente a la grúa. En el caso del Model S, ni siquiera el operario de la grúa puede cambiarte la rueda, y tienes que ir al taller más cercano, si es que el pinchazo tiene solución.
La diferencia puede ir desde salir a la carretera en menos de una hora hasta tener que demorarse durante varias horas. Teniendo en cuenta el espacio de carga disponible en el Model S, no parecería una locura que pudiese llevar una rueda.
Su comportamiento en frío
Según su experiencia personal, cuando hace mucho frío el Model S puede llegar a consumir hasta 80 kilómetros de autonomía en viajes de 50 kilómetros. Esto se debe a un aumento del consumo inicial para poder calentar la cabina y la batería. Esto en un viaje largo no es tan trascendental, pero para viajes cortos aumenta el consumo de manera importante.
Solo tiene dos posavasos
Quizá esto no sea tan importante para los europeos, pero muchos americanos dicen quejarse de que 2 posavasos son demasiado pocos. Incluso venden accesorios para poner en la controla centra que incluyen posavasos adicionales. Coches de la competencia como BMW y Audi llevan más sitios donde apoyar la bebida.
Se necesita más planificación a la hora de viajar
Antes de hacer un viaje largo con un Model S, debes saber dónde vas a encontrar los Supercargadores y parar un mínimo de 30 minutos en cada uno de ellos. Con un coche de combustión puedes salir de casa y parar «cuando te apetezca».
Entrar y salir del coche
Para un hombre alto (él mide 1,89 metros) resulta algo incómodo entrar y salir del coche. Sobre todo deberíamos pensar en la gente más mayor, y no en los jóvenes. David asegura que es más fácil subir y bajar del Mini Cooper de su mujer.
La pantalla táctil
La gran pantalla táctil es algo que a causado mucha controversia. Como no dispone de botones físicos, el conductor necesita mirar a la pantalla para ajustar cosas como el climatizador y el sistema de radio. Esto puede ser una distracción al volante.
El freno y el acelerador están demasiado cerca
El espacio entre el freno y el acelerador es mucho más pequeño que en otros coches. Los conductores con los pies grandes o utilizando botas de invierno pueden tocar ambos pedales si querer. Esto puede llegar a aumentar la distancia de frenado en un caso de emergencia.
Quiero mencionar que David termina el artículo diciendo que después de tres años y 80.000 kilómetros con el Model S, nunca se ha arrepentido de su compra. Pero es que el coche perfecto no existe y menos el coche perfecto para todas las personas.
Fuente | GreenCarReports
