La totalidad de los 5.600 Volkswagen e-Golf vendidos en Estados Unidos han sido llamados a revisión por el fabricantes. Al parecer el problema radica en un fallo en la batería, que hace que el coche active el apagado de emergencia, provocando la detención del vehículo.
Esto de momento afecta sólo a las unidades vendidas en Norteamérica. No hay confirmación si los modelos vendidos en Europa están afectados. Pero teniendo en cuenta que todos salen de la misma planta, es un extremo que no se puede descartar.
Por suerte la reparación es sencilla, y simplemente necesita una actualización del sistema, que corrija ese fallo. Algo que la marca por supuesto está realizando de forma gratuita.
Se trata de una llamada a revisión sin grandes traumas, ya que el número de coches a tratar es pequeño, y además es una reparación rápida y económica. Pero llega en un mal momento después del escándalo de las emisiones de Volkswagen, que en el mercado americano todavía tiene mucho recorrido. Una llamada a revisión que no hace más que volver a poner el foco sobre un fabricante que trabaja para pasar página de su engaño en las emisiones de sus coches, pero que tendrá que seguir un tiempo más en la primera plana por malas noticias.
Vía | The Guardian
