Estos días estamos viendo un verdadero torrente de información procedente de la cuenta de Twitter de Elon Musk. Un aluvión de información que supone para muchos expertos una forma revolucionaria de hacer marketing en el mundo del automóvil. El objetivo es tener preparada la producción, y a los clientes, ante la llegada de un coche que cambiará para siempre el mundo del automóvil.
Y no es que vaya a hacerlo con una tecnología arrolladora ni apabullante. En las últimas horas hemos visto como el propio Musk ha intentado rebajar algo las elevadas expectativas que se habían creado en torno al Model 3, al que muchos catalogaban como una nave espacial sobre ruedas. Pero eso no frenará unas ventas que romperán todos los records logrados por los coches eléctricos.
Tesla espera lograr alcanzar una producción del más económico de su gama de unas 430.000 unidades entre el arranque de 2017, y 2018. Un objetivo muy ambicioso que obligará al fabricante a lograr una capacidad de producción que arrancará en torno a las 2.000 unidades a la semana durante el inicio, que pasarán a las 5.000 unidades/semana para finales de 2017, y que irán aumentando su cifra hasta llegar a las 10.000 unidades a la semana a finales de 2018.
Si Tesla logra cumplir con sus objetivos, esto supondrá que el Model 3 tendrá unas ventas que serán muy cercanas a todas las matriculaciones de coches eléctricos en el mundo el pasado año. Y más importante, sólo con la mitad de estas cifras, la otra mitad irá al resto de mercados, en Estados Unidos Tesla conseguiría mejorar las cifras de ventas del BMW Serie 3 y el Mercedes Clase C…combinados. Un dato realmente alarmante para los fabricantes alemanes.
Por supuesto, a esto habría que añadir las cifras del Model S y X, que se espera que sigan creciendo a menor ritmo, pero que alcanzarán las 100.000 unidades. Algo que llevará la producción de Tesla en 2018 a nada menos que 500.000 unidades.
Para algunos expertos, como Salim Morsy de Bloomberg «Vender esa cantidad de un vehículo que parte desde los 35.000 dólares será algo sin precedentes. Podría pasar, pero personalmente no creo que lo logren«. No es la única voz pesimista sobre el objetivo de Tesla. Son muchos los analistas que ven poco probable que Tesla logre alcanzar el objetivo de 500.000 unidades en 2018.
Pero al mismo tiempo estos mismos analistas admiten que la estrategia de Tesla es algo diferente, y el lanzamiento del Model 3 está rompiendo las reglas habituales. Ponen como ejemplo que a falta de apenas tres meses para el arranque de la producción, Tesla se haya saltado la fase de pruebas de los vehículos de pre-producción, produciendo los primeros modelos beta con la misma maquinaria que se usará en la producción final. Un proceso que normalmente lleva de media unos seis meses.
Pero esto no será un problema para Tesla. El fabricante podrá saltarse este trámite gracias en gran parte a que las primeras 30.000 unidades estarán destinadas a sus propios empleados. Unos probadores que permitirán pulir cualquier detalle sin que ello afecte a la imagen de la marca, y ahorrar esos 6 meses comentados.
Puede que Tesla no logre alcanzar al 100% sus objetivos, pero como vemos incluso quedándose cortos el Model 3 será un rompehielos irrumpiendo en medio de un sector dominado por unos fabricantes tradicionales que se han quedado mirando al iceberg sin apenas reaccionar.
Un coche eléctrico que llevará a todo el sector de los modelos alternativas a un nuevo nivel, algo que seguro beneficiará también a aquellas marcas que si han apostado por esta tecnología.
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Vía | Bloomberg
