De cara al concurso de elegancia de Pebble Beach, que tiene lugar estos días en California, Audi ha presentado un nuevo prototipo 100% eléctrico que supone un adelanto de cómo imagina la marca alemana que serán los superdeportivos del futuro. ¿Sus posibilidades de llegar a producción? Sobre el papel, escasas, pero no deberíamos descartar que el futuro R8 tome alguno de sus rasgos estilísticos.
El Audi PB18 e-tron es un superdeportivo con una configuración hatchback muy poco usual, similar a la que podemos encontrar en un Ferrari GTC4Lusso. Así, tiene un portón trasero que da paso a un maletero de tamaño considerable, de unos 360 litros, similar al que podemos encontrar en modelos compactos como un Volkswagen Golf. Esto es posible gracias al uso de motores eléctricos, pues ahorran mucho espacio respecto a un enorme motor gasolina en posición central. En cuanto a sus dimensiones, mide 4,53 metros de largo, 2 metros de ancho y 1,15 metros de alto. Además, tiene un peso razonable de 1.550 kilos.
Estéticamente, el modelo bebe de otros modelos de la marca ya presentados. Así, las líneas del frontal recuerdan en gran parte a las vistas en el prototipo original del e-tron Quattro, si bien no termina de quedar claro si la enorme parrilla trapezoidal es funcional en el caso de este superdeportivo. Los pilotos unidos son un lejano guiño al nuevo A7 Sportback, y además, recicla soluciones prácticas del e-tron Quattro como el uso de cámaras en lugar de retrovisores.
En el interior, todo el cockpit está orientado hacia el conductor. Este diseño está inspirado en las motos de competición, si bien a nosotros nos recuerda más a un avión. El coche cuenta, entre otras cosas, con una pantalla de realidad aumentada tras el volante, un tipo de solución que se irá extendiendo poco a poco en la industria (el Mercedes-Benz Clase A ya equipa un sistema similar).
El coche cuenta con tres motores eléctricos, uno para el eje trasero, y dos para las ruedas traseras. Dispone de un total de 680 cv, más que suficientes para hacer el 0 a 100 km/h en poco más de dos segundos. Audi «imagina» que la batería (de 95 kWh) es de electrolito sólido, mientras que el coche puede cargar a una potencia de 350 kW, lo que nos hace pensar que en realidad bajo la carrocería se esconden los sistemas del Porsche Taycan.
El PB18 e-tron dispone de un sistema de vectorización de par para maximizar la tracción, mientras que el sistema de frenada regenerativa es tan potente que los frenos de disco sólo actúan en las deceleraciones más bruscas. La autonomía estimada por Audi es de 500 km bajo el ciclo WLTP.
El coche es definido por Audi como un «nivel cero». ¿Qué significa esto? Que no tiene ningún tipo de asistencia a la conducción: es un vehículo pensado para el disfrute total del conductor.
Fuente | Audi
