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Bollinger Motors pide oficialmente a Tesla el poder usar su red de Supercargadores

Para quienes no les conozcan, Bollinger Motors es una pequeña startup norteamericana que se ha lanzado al diseño y fabricación de un todoterreno eléctrico. No un todocamino. Un verdadero todoterreno sin muchas concesiones a lo estético, y que se ha convertido por méritos propios en una de las principales atracciones para los que buscan un vehículo para salirse del asfalto, y hacerlo sin emisiones.

Ahora después de presentar su primera propuesta, el B1, un modelo que cuenta con baterías desde los 60 kWh, hasta la nueva de 120 kWh, que le permiten a pesar de su tosco diseño y la poca eficiencia de su propuesta, lograr autonomías por encima de los 380 kilómetros en condiciones reales.

Ahora gracias a la llegada de esta nueva batería, que debería ser capaz de acceder a recargas rápidas de elevadas cifras de potencia, los responsables de Bollinger han lanzado una interesante propuesta. Han solicitado mediante Twitter a Elon Musk el poder hacer uso de su red de Supercargadores.

De momento no hay respuesta, al menos no oficial. Pero la simple petición ha levantado una gran expectación ya que sin duda sería un verdadero golpe de efecto si Bollinger logra convertirse en la primera marca en acceder a la hasta ahora acotada red de Supercargadores de Tesla.

Por un lado la petición tendría sentido, y sería fácilmente asimilable por Tesla tanto desde el punto de vista técnico, como publicitario. Y es que Bollinger es una pequeña compañía estadounidense, y el permitir acceder a la red podría ser un movimiento mediático favorable a una Tesla envuelta en momentos turbulentos por culpa de su anuncio de salir del mercado bursátil.

Por el otro lado Bollinger no es un fabricante de volumen, por lo que su uso de la red será casi anecdótico. Por lo tanto, sus coches no serán una molestia para el resto de usuarios de Tesla. Además este movimiento podría permitir a Tesla experimentar a pequeña escala con el impacto de abrir su red a otras marcas. Algo que el propio Elon Musk ha insinuado en varias ocasiones como una forma de ayudar a financiar la expansión de la red.

El principal problema es que Tesla solicitará a Bollinger que participe en la propia expansión o mantenimiento de la red. Algo que puede ser una losa insalvable para una pequeña startup que pelea por lograr arrancar su proyecto, y cuyos fondos son extremadamente limitados si los comparamos con otras marcas tradicionales.

Pero la petición está ahí, y para Bollinger sólo podrá haber noticias positivas, tanto si recibe una respuesta afirmativa, como si la recibe negativa, ya que habrá logrado una buena cuota de publicidad gratuita al convertirse en la primera marca en solicitar de forma oficial el poder usar la red de Supercargadores de Tesla.

 

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