La refrigeración de la batería del Tesla Model 3 es mucho mejor que la de los Model S y Model X. ¿Por qué?

El sistema de refrigeración de las baterías del Tesla Model 3 es superior al de los Model S y Model X por varias razones. Los módulos de batería del Model 3 son completamente nuevos, y no tienen nada que ver con los modelos anteriores de la marca. Son más baratos de fabricar, y además, tienen un sistema de enfriamiento más eficiente.

La principal mejora radica en que ahora las celdas de las baterías están directamente pegadas al tubo de refrigeración. Por otro lado, el tubo de refrigeración cubre un mayor porcentaje de la altura de las celdas, y le corresponde un número de celdas menor por tramo que en los Model S y Model X, lo que mejora la capacidad de enfriamiento.

La evolución de los sistemas de refrigeración de las baterías Tesla ha sido la siguiente: para empezar, cada módulo de las baterías de primera generación de los Model S y Model X tiene un solo tubo de refrigeración. Cada tubo de refrigeración, por lo tanto, tiene que enfriar 444 celdas, lo que conlleva que las celdas situadas al final del tubo de refrigeración se calientan más que las del principio.

Las baterías de segunda generación de los Model S y Model X tienen dos tubos de refrigeración por módulo en lugar de uno solo. Este diseño mejorado sólo se puede encontrar en las versiones de 100 kWh (100D y P100D) de los modelos de lujo de la marca californiana. Cada tubo de refrigeración tiene que enfriar 258 celdas, en lugar de las 444 de la anterior generación. Por ello, el enfriamiento es mucho más eficaz.

Las baterías del Model 3 están ensambladas por completo de forma automática. Los tubos de refrigeración son similares al cinturón de una ametralladora, pues las celdas cilíndricas van pegadas a ellos. Cada tubo sólo tiene que refrigerar un total de 164 celdas, y además es más grande que los tubos de enfriamiento de las baterías de los Model S y Model X, por lo que puede pasar una mayor cantidad de líquido de refrigeración. A esto hay que añadir el mayor porcentaje de altura cubierta por celda, algo de lo que hablamos al principio.

Siete «cintas de ametralladora» hacen un módulo de batería del Model 3, las cuales están situadas en paralelo, lo que consigue lograr un mejor enfriamiento que el diseño en serie de las anteriores generaciones. Quizás sea gracias a este diseño por el que el Tesla Model 3 tiene una gran eficiencia (el Long Range RWD es capaz de lograr una autonomía de 537 km bajo el realista ciclo de homologación EPA).

Fuente | InsideEVs