En 2020 las alternativas de los consumidores a la hora de seleccionar un coche eléctrico se dispararán. Algo que sin duda acentuará la competencia lo que favorecerá al cliente. Entre las nuevas propuestas está el espectacular Polestar 2, que comenzará sus entregas el próximo año y que sin duda abrirá una nueva vía para los que busquen una berlina eléctrica.
Como recordamos, el Polestar 2 contará con un cuerpo de 4.61 metros de largo, y en sus primeros meses solo se ofrecerá en su versión tope de gama, la cual contará además de un amplio equipamiento, con 500 km WLTP de autonomía gracias a una batería de 78 kWh. Esta variante tendrá tracción total, 402 CV de potencia (300 kW) y 660 Nm de par, pudiendo hacer el 0 a 100 km/h en 4,7 segundos, todo con un precio de 59.800 euros.
Como vemos la propuesta mecánica y económica es muy similar a la del Tesla Model 3. Apenas 120 euros de diferencia entre ambos. Algo que hará que el cliente tenga que valorar otras opciones para determinar qué modelo es más interesante para su caso.
A favor del Polestar 2 están cuestiones subjetivas como su diseño. Un aspecto muy moderno y atractivo, que tiene su extensión en un interior que a primera vista rezuma calidad y elegancia. Algo que hereda de su hermana Volvo de la que ha aprendido todo lo bueno.
El equipamiento tampoco tiene lagunas, con elementos como faros matriciales Pixel LED, techo de cristal, asientos eléctricos con apoyo lumbar y calefacción tanto en los delanteros como en los traseros, equipo de sonido Harman Kardon, carga por inducción de teléfonos móviles, sistema de info-entretenimiento con Google Assistant, sistema de ayuda a la conducción Pilot Assist, cámara de 360 grados…etc etc.
En contra podemos anotar aspectos como su menor autonomía. Bajo el ciclo WLTP el Polestar 2 consigue 500 km, mientras que el Tesla Model 3 Long Range Dual Motor llega a los 560 km. Una eficiencia que la berlina americana ha probado en diferentes test que lo han colocado entre los modelos más eficientes del mercado, y donde incluso el propio presidente de Polestar ha admitido en su momento que Tesla está muy por delante de ellos.
En el aspecto de la habitabilidad y capacidad de carga, aquí casi podríamos añadir un empate. Por un lado el Polestar 2 logra una mayor capacidad en el maletero trasero, con 438 litros frente a los 425 del Tesla. Y eso a pesar de contar con un cuerpo casi 10 centímetros más corto. La cuestión es que el Model 3 cuenta con un segundo espacio en la parte delantera que añade otros 120 litros.
En la recarga la cuestión está muy igualada. Ambos son capaces de acceder a recargas monofásicas a 32 amperios, trifásicas hasta 11 kW, y en corriente continua. En este último aspecto el modelo sueco puede alcanzar los 150 kW, mientras que el Model 3 podrá llegar a los 250 kW. Eso si, necesitará que la red ofrezca estas potencias, llegando en estos momentos a los 200 kW.
La principal diferencia en este aspecto es que el Model 3 cuenta con una amplia red de Supercargadores, mientras que el Polestar dependerá de la expansión de redes como IONITY, que por cierto el Tesla también puede usar. Queda por ver como evoluciona el tema de los precios en estas redes, que en la actualidad ofrece una tarifa plana de 8 euros por carga, que permite a los usuarios de modelos de amplia autonomía sacar el máximo partido cuando hagan una carga a tope, pero supone un lastre si la sesión es más corta. Por su parte los Supercargadores cuentan con un coste bastante razonable y un precio por kWh.
Entre los contras del Model 3 está la cuestión de los acabados, con algunos fallos de fabricación en determinadas unidades, algunos errores en el sistema de info-entretenimiento, así como unos plazos para la reparación de los vehículos en algunos casos elevados debido a la falta de personal.
En el otro lado de la balanza podemos añadir el sistema de actualizaciones, que hace del Model 3 un coche en constante evolución y mejora. Como ejemplo la nueva V10, que añade mejoras generales, además de un amplio equipamiento de entretenimiento como el reproductor de Netflix, Youtube, además de nuevos juegos para hacer de las esperas unos momentos más amenos.
También queda por ver como funcionan los sistemas se seguridad del Polestar, que tienen en el Autopilot un duro rival. Un sistema que Tesla no para de evolucionar, y que ya permite lograr un nivel de conducción autopilotada muy elevado.
Otro punto a favor del Polestar, y que todavía tenemos que confirmar de forma oficial, es que los propietarios casi con total seguridad podrán llevar su coche a realizar las revisiones a su centro Volvo más cercano. Por su parte los dueños de un Tesla tendrán que acudir a uno de los escasos servicios técnicos, o echar mano de los Rangers si es algo que no necesite desplazar el coche. Algo que en el caso de España supone llevar el coche a Madrid, Barcelona, o acudir a Lisboa. En breve la red de expandirá con un servicio en Oporto, y en 2020 deberían abrir los situados en Bilbao, Valencia y Málaga.
Ahora cada uno debe decidir qué opción es mejor. Dos alternativas con sus pros y sus contras, que sin duda permitirán ampliar de forma sustancial la calidad de la oferta dentro del sector del coche eléctrico, y que hará que más de uno dude entre uno u otra opción. Algo que como hemos comentado al principio, será beneficioso para el consumidor ya que hará que la competencia se avive un poco.
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