El mítico fabricante sueco SAAB, completamente integrado en el gigante norteamericano General Motors desde el año 2000, fue vendido al fabricante de superdeportivos Spyker en 2010 debido a la crisis económica mundial. Desafortunadamente, las pérdidas continuaron sacudiendo a SAAB, que quebró el 19 de diciembre de 2011 después de que General Motors bloqueara su venta al fabricante chino Youngman para evitar que su tecnología cayera en manos de la competencia.
Tras una seria de intentos por parte de fabricantes como Mahindra de adquirirla, en 2012 SAAB finalmente pasó a manos de NEVS (National Electric Vehicle Sweden), una empresa sueca con capital chino y japonés y tecnología nipona dedicada al desarrollo de coches eléctricos. Sin embargo, antes de que la firma pudiera retomar la producción de sus vehículos General Motors volvió a hacer acto de presencia y bloqueó la producción de los nuevos 9-4X y 9-5, dejando a SAAB con el viejo 9-3 de 2003 como único soporte de vida.
Ese mismo año, su antigua hermana Scania (ahora en manos del grupo Volkswagen) impidió a NEVS seguir empleando el logo del grifo que había caracterizado a los SAAB en las últimas décadas, mientras que en 2014 sus problemas de liquidez hicieron que también perdiera los derechos de la denominación comercial SAAB, cuyo uso fue vetado en 2016 por SAAB AB, la antigua división aeronáutica del fabricante, ahora independiente de SAAB Automobiles y Scania.
A pesar de todo, NEVS no ha dejado de trabajar en el desarrollo de vehículos eléctricos: en los últimos años, la heredera de SAAB ha recibido importantes inyecciones de capital (en 2019 el gigante chino Evergrande compró el 51% de la compañía, anunciando una inversión de 2.000 millones de dólares en el fabricante sueco) y ha colaborado con empresas de la talla de Koenigsegg o Protean (esta última ahora de su propiedad).
Gracias al apoyo financiero de Evergrande, que además tiene importantes participaciones en empresas como el fabricante chino de baterías Cenat o el proveedor de componentes TeT Drive Technology, NEVS tiene previsto comenzar a lanzar nuevos modelos eléctricos a corto plazo (actualmente produce una versión eléctrica del viejo SAAB 9-3, renombrado como NEVS 9-3 EV, en su planta de Tianjin, China).
Aparentemente, el primer modelo completamente nuevo de NEVS será un SUV eléctrico de estética fuertemente inspirada en la del extinto SAAB 9-4X, pues se acaban de filtrar una serie de imágenes procedentes de la oficina de patentes que nos muestran las líneas del nuevo automóvil. Todavía se desconocen las características técnicas de este vehículo, pero teniendo en cuenta todos los recursos tecnológicos de Evergrande y NEVS, podemos esperar un todocamino eléctrico bastante competitivo. ¿Llegará este modelo a Europa? Actualmente NEVS cuenta con una planta en el viejo continente, la mítica factoría sueca de Trollhättan, por lo que es altamente probable que terminemos viéndolo en nuestras carreteras.
Fuente | Cochespias
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