El Volkswagen ID.3 recibe duras críticas de la prensa alemana durante las primeras pruebas

El Volkswagen ID.3 recibe duras críticas de la prensa alemana durante las primeras pruebas

5 min. lectura

Publicado: 10/09/2020 09:56

Había mucha expectación por ver como se desarrollaban las primeras tomas de contacto con el Volkswagen ID.3 de producción. Un modelo que ha comenzado sus entregas en algunos lugares, como Alemania, donde algunas revistas han tenido la oportunidad de realizar un primer test. Una prueba que ha tenido claros y oscuros en un proyecto crucial para el fabricante germano.

Una de las primeras en poder coger una unidad ha sido la prestigiosa revista Auto Motor Sport, que ha realizado una pequeña toma de contacto, y que les ha servido para destapar las partes más positivas, pero también algunas negativas que ensombrecen algo el desembarco de este modelo.

La unidad probado ha sido la correspondiente con las primeras en ser entregadas. El ID.3 1st Max con batería de 58 kWh. Un modelo que en España arranca en los 48.890 euros y que se coloca de momento como la tope de gama con una versión de acceso con menos equipamiento y que arranca en los 43.000 euros.

Uno de los puntos positivos es que Volkswagen ha sabido aplicar toda su experiencia en el desarrollo de un chasis que saca el máximo partido a los 150 kW (204 cv) que rinde esta versión. Algo que le permite gozar según el probador de: «un comportamiento de conducción perfectamente equilibrado, una dirección con fuerzas de sujeción bien medidas, así como una buena tracción. Los discos de freno delanteros y los frenos de tambor traseros frenan de forma fiable«.

En el apartado de la autonomía los resultados no son tan buenos. Con una conducción tranquila, el ID.3 ha promediado un consumo de 16.1 kWh a los 100 km, lo que supondría una autonomía bajo estas circunstancias de unos 359 kilómetros. Una cifra cercana a los 420 km logrados bajo el ciclo WLTP. Pero peor es la lograda en las pruebas realizadas en un tramo que incluye autovía y conducción urbana, y donde la cifra de consumo se ha disparado hasta los 23.2 kWh a los 100 km. Algo que según el probador, se traduciría en una autonomía de unos 260 km hasta terminar la batería.

Problemas con las calidades y el software en el ID.3

Según el probador, «el coche no cumple con los altos requisitos habituales de Volkswagen en cuanto a precisión de ajuste de las partes de la carrocería, huecos mínimos, calidad…»

Los plásticos son duros y muy sensibles a la suciedad. El interior del capó parece que fue pintado con un spray. La electrónica muestra debilidades significativas en el modelo de prueba. El sistema de info-entretenimiento se inicia muy lentamente, el sistema de navegación a menudo permanece desorientado durante varios cientos de metros. El sistema no solicita ningún servicio en línea. El monitor de diez pulgadas está lejos del conductor y, por lo tanto, es algo difícil de manejar. Cambiar al control por voz no es muy eficiente porque el sistema no funciona correctamente.

Durante la prueba también han destacado los problemas de desgaste en los asientos, que comparan con los de un coche con 200.000 kilómetros. Algo impensable en un modelo casi nuevo y con un precio cercano a los 49.000 euros.

El resultado para los probadores es que el planteamiento en cuanto a ensamblado, materiales y software, dan la impresión de ser en el mejor de los casos los de un coche con la mitad de precio del que contará el ID.3.

Unas duras críticas que veremos si se confirman con las primeras impresiones de los clientes que esta semana empezarán a recibir sus unidades de este crucial modelo sobre el que hay grandes esperanzas, y muchas miradas puestas.

Fuente | Auto-motor-und-sport