La construcción de la fábrica europea de Tesla parece que marcha a toda velocidad, pero no sin algunos tropiezos. El último ha sido un problema con la factura del agua. Un elemento clave para la instalación que parece está provocando más tensiones de las esperadas y que ha resultado con el corte del suministro por falta de pago.
Según el portal alemán Rbb24, después de varios avisos y una amenaza de bloqueo que no recibieron respuesta por parte de Tesla, la compañía del agua Strausberg-Erkner ha tomado tomando medidas drásticas al cortar el aguar a la instalación de Tesla en Grünheide.
Desde la compañía han indicado que no se habrá trato de favor para nadie y que después de 15 días de llamadas sin respuesta, han decidido cortar el agua. Algo que ha supuesto que el fabricante americano que haya tenido que parar durante unas horas sus trabajos.
Después de esto, Tesla ha decidido mover pieza firmando un nuevo contrato con la compañía del agua, despejando así un obstáculo importante para la aprobación de la fábrica. Un contrato que tiene en cuenta tanto el suministro de agua como las aguas residuales.
Un suministro que ayer por la tarde había sido recuperado, permitiendo al fabricante norteamericano continuar con sus trabajos de construcción.
¿Sin fábrica de baterías?
Pero mientras que el acuerdo y desacuerdo no deja de ser una cuestión de política de empresas, lo que si ha permitido este nuevo acuerdo es desvelar detalles que indican que este nuevo contrato supondrá una reducción drástica del consumo estimado de agua. Tesla ha confirmado que de los 3.3 millones de litros al año que esperaban usar en un primer momento, pasarán a 1.4 millones de litros.
Esto tendrá podría ser el resultado de los cambios que el pasado verano Tesla ha realizado en su proyecto, y donde indicaba la «eliminación de la producción de baterías del sistema A007» (ver PDF). Por lo que salvo nuevo cambio de dirección, finalmente en esta primera fase Tesla no fabricará baterías en la planta de Berlín.
Algo que de confirmarse, supondría añadir más presión a las fábricas de baterías de Tesla en Nevada y de China, de donde posiblemente llegarán las celdas que se usen en la europea.
Fuente | Rbb24
