Esta mañana se ha publicado el acuerdo firmado entre el fabricante coreano Hyundai, y la marca británica Ineos, que colaborarán en el desarrollo de sistemas a hidrógeno para diferentes usos, como en la instalación dentro de un todoterreno.
Este acuerdo supondrá una colaboración en aspectos como el desarrollo de una red de suministro de hidrógeno en Europa, así como en el uso de pilas de combustible de Hyundai en los vehículos de Ineos, como el Grenadier 4X4.
La idea de Ineos es lanzar una versión con motor de combustión en 2022. Un modelo que se fabricarán en la antigua planta de Mercedes en Francia, y que ha sido seleccionada por Jim Ratcliffe, propietario y fundador de la compañía y uno de los principales apoyos para el si al Brexit. Un Brexit que ahora les ha llevado a mover la producción a Francia.
El objetivo es desarrollar un todoterreno capaz de ofrecer un buen rendimiento en los ambientes más duros. Primero con motorizaciones de combustión, que posteriormente se completará con una a hidrógeno. Una decisión que desde la marca defienden indicando que para el tipo de uso de este vehículo, las baterías no ofrecen la flexibilidad y capacidades suficientes para cumplir con las exigencias de los propietarios.
Así lo ha indicado Mark Tennant, director comercial de Ineos Automotive, que ha añadido que las pilas de combustible de hidrógeno eran parte del plan a más largo plazo. “Necesitamos algo que nos dé una buena autonomía para viajar a lugares como el interior de África o Australia»
Una apuesta que se enmarca dentro de la actividad actual de la propia división de productos químicos de Ineos, que ya produce 300.000 toneladas de hidrógeno al año y que quiere lograr unas sinergias con la movilidad en ambientes muy diferentes a los que estamos acostumbrados.
Queda por ver ahora en el resultado de la colaboración entre Ineos y Hyundai. Unos trabajos de los que todavía no se han dado pistas, pero que pueden tomar como base de referencia el sistema que monta el Hyundai Nexo, que como recordamos cuenta con un motor de 120 kW (163 CV) mientras que los depósitos de hidrógeno son capaces de almacenar 6.3 kilos, que le permiten lograr una autonomía de 669 km bajo el ciclo WLTP.
Cifras que un modelo pensado para moverse por zonas aisladas podría incluso mejorar, principalmente pensando en que no será fácil encontrar un lugar donde repostar en su recorrido.
Fuente | Ineos
