General Motors tiene un objetivo claro: liderar las ventas de coches eléctricos en Estados Unidos (superando por el camino al actual número uno, el joven fabricante Tesla) mediante una inversión masiva de 27.000 millones de dólares, presentando un total de 30 modelos y alcanzando el millón de unidades vendidas en todo el mundo para 2025.
Uno de los puntos clave del plan de General Motors pasa por reducir los precios de las baterías mediante una escalada en su producción. Además, el gigante estadounidense quiere ofrecer una amplísima oferta de vehículos que cubra todas las necesidades de los clientes, desde modelos pequeños como el Chevrolet Bolt hasta enormes pick-up como la GMC Hummer EV.
La nueva plataforma modular BEV3 y las baterías Ultium, desarrolladas conjuntamente con LG Chem, serán los principales artífices de esta revolución eléctrica por la que está apostando con fuerza Mary Barra, máxima responsable del grupo norteamericano. Los principales focos de atención de la compañía serán su mercado natal y China, pues actualmente su presencia en Europa es residual.
Dentro de los planes de la multinacional, la histórica marca Cadillac tendrá un papel preeminente. La firma premium se convertirá en la punta de lanza de General Motors, siendo la encargada de plantar cara de forma directa a la todopoderosa Tesla mediante un enfoque en la tecnología de vanguardia (las últimas novedades en materia de conectividad, los sistemas de conducción autónoma desarrollados por Cruise, etc).
Sin embargo, General Motors no solo tendrá que enfrentarse a Tesla en este sector. Sin ir más lejos, el Grupo Volkswagen tiene el objetivo de vender 1 millón de coches eléctricos a nivel mundial para 2022, tres años antes que su rival americano. Además, uno de sus principales mercados será precisamente Estados Unidos, donde la compañía alemana espera lograr un importante éxito de ventas con el ID.4.
Tanto General Motors como el Grupo Volkswagen contarán con dos importantes ventajas frente a Tesla: un servicio técnico asentado con una extensa red de concesionarios y talleres, y una calidad constructiva más consolidada. Sin embargo, Tesla continúa por delante a nivel de infraestructura gracias a la red de Supercargadores; además, tecnológicamente también se encuentra un paso por delante.
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