Tras el lanzamiento de la berlina ejecutiva Taycan, que se ha convertido en todo un éxito de ventas, Porsche seguirá expandiendo su gama eléctrica a lo largo de la década. Así, está previsto que el año que viene la marca alemana presente la segunda generación del SUV Macan, la cual prescindirá de los motores de combustión interna.
De acuerdo con un informe publicado por la prensa estadounidense, el tercer modelo eléctrico de la compañía será el 718 Cayman/Boxster, cuya nueva generación se presentará en 2024. Aunque este modelo mantendrá el planteamiento de sus antecesores (el Cayman seguirá siendo un deportivo «de bolsillo» y el Boxster su versión roadster), ambos recibirán una estética completamente actualizada.
Al igual que el Macan, el 718 recibirá un nuevo frontal inspirado en las líneas del Taycan, con unos faros más angulosos y anchos. El informe señala que su diseño será muy cercano al del prototipo de competición Mission R, presentado hace apenas unas semanas, si bien sus líneas se verán menos agresivas y su perfil y trasera se asemejarán más a los de su predecesor.
El habitáculo será más futurista que el del Taycan, distanciándose del conservadurismo de los Cayman y Boxster actuales: Porsche ha analizado su base de clientes en China, uno de sus mercados más importantes, donde la edad promedio del comprador de un 718 es de 31 años. Por ello, la firma quiere convertirlo en su modelo «más moderno».
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En un principio, los renovados Cayman y Boxster emplearán una versión acortada de la plataforma PPE que debutará el año que viene con el Macan; por lo tanto, podemos esperar que incorporen avances como un sistema eléctrico de 800 voltios. Para compensar el peso extra del pack de baterías, la compañía empleará materiales avanzados y ultraligeros en su construcción.
Su precio de partida será similar al del 718 actual, cuyas tarifas arrancan en poco más de 60.000 euros. Las versiones de acceso serán de tracción trasera, mientras que las más potentes (Cayman GT4, Boxster Spyder…) añadirán un motor en el eje delantero, por lo que contarán con tracción total. La autonomía mínima será de 400 km por carga.
Dado que el 911 no se electrificará, Porsche ya no tiene miedo de que el 718 canibalice a su modelo estrella, motivo por el cual las versiones más potentes de la gama tendrán un rendimiento cercano al de su hermano mayor. En paralelo, Porsche seguirá ofreciendo los actuales Cayman y Boxster, si bien solo convivirán con sus sustitutos durante un breve periodo de tiempo.
Fuente | Ecomento
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