Actualmente, el Grupo Volkswagen uno de los principales vendedores de coches eléctricos a nivel mundial. Durante los nueve primeros meses del año fueron 293.100 unidades de eléctricos puros y otros 246.000 híbridos enchufables. El máximo dirigente del Grupo, Herbert Diess, ha difundido una tabla comparativa donde se ve que algunos de sus eléctricos ya interesan respecto a su equivalente diésel incluso al comprarlos.
Los datos de la comparativa vienen de la revista AutoZeitung, que demás de hacer comparaciones con BMW y Mercedes-Benz -con el mismo resultado-, la hizo con Volkswagen ID.4 Pure frente a Tiguan 2.0 TDI, de Skoda Enyaq iV 80 frente a Kodiaq 2.0 TDI 4×4, y de Audi Q4 50 e-tron quattro frente a Q5 50 TDI quattro, en este último caso la equivalencia en potencia no es tal. Los precios son válidos para el mercado alemán y con las ayudas vigentes. Los eléctricos salen más baratos incluyendo dichas ayudas.
Diess aprovechó la plataforma profesional LinkedIn para difundirla: «Conducir un coche con motor de combustión interna es hasta un 50% más caro que un coche eléctrico. AutoZeitung hizo las cuentas, teniendo en cuenta todos los costes». Diess omitió la depreciación y coste de mantenimiento, pero las concusiones son las mismas.
Continuó diciendo: «Conducir un Volkswagen Tiguan cuesta en torno a un 30% más por kilómetro que un ID.4. Un kilómetro en un Audi Q5 cuesta como un 40% más comparado con un Q4 e-tron. Y conducir un Skoda Kodiaq sale a un 50% más caro por kilómetro comparado con un Enyaq». Cualquiera diría que los fabricantes están entorpeciendo el auge de la electromovilidad, al menos los de su grupo.
«Es hora de cambiar»
Herbert Diess, CEO del Grupo Volkswagen
Desde luego, datos en mano en el mercado alemán, comprar los equivalentes térmicos a los eléctricos mencionados carece de sentido. Eliminado ya el diferencial de precio -que asumen los contribuyentes alemanes con sus impuestos- el coste por kilómetro sale favorable desde el primer día. Los térmicos siguen ganando en autonomía y en velocidad máxima, características que ya no son tan importantes pese a ser el país de las Autobahnen.
Diess, el mismo CEO que está advirtiendo de que hacer la transición a la electromovilidad a un ritmo lento puede costar miles de empleos -al menos a micrófono cerrado-, y que anima a la competencia sana con Tesla, apoya con cada vez menor disimulo sus modelos eléctricos. Las gamas ID de Volkswagen, e-tron de Audi e iV de Skoda van a ir creciendo aprovechando sinergias internas. CUPRA ya está en el club con el lanzamiento del Born, y SEAT sigue sin una oferta electrificada contundente.
