Geely defiende el metanol en motores térmicos incluso con temperaturas polares

Uno de los combustibles alternativos menos conocidos es el metanol (CH₃OH), un hidrocarburo muy simple -el alcohol más básico que hay- que puede obtenerse a través de energías renovables para producir emisiones netas cero en carbono (*). El fabricante chino Geely confía en convertirlo en una realidad comercial para vehículos térmicos, incluyendo híbridos no enchufables.

En la región de Heilongjiang, al norte de China, se pueden disfrutar temperaturas inferiores a -40 ºC, suficiente frío para rajar las piedras y poner la límite algunos sistemas mecánicos. Geely dice haber resuelto los problemas de arranque en frío. El Geely Emgrand Methanol Hybrid combina un motor 1.8 de 97 kW/130 CV y un motor eléctrico de 100 kW/134 CV. Según el fabricante, la potencia combinada del sistema es de 272 kW/364 CV (no me salen los números tampoco).

Este modelo puede funcionar con una no-mezcla de metanol, al 100%, y por lo tanto sin una gota de petróleo. El E5 que solemos echar en Europa es 5% bioetanol y 95% petróleo fósil. Eliminados los problemas de arranque en frío, el metanol puede ser un combustible alternativo interesante. En el caso de China, estando el litro a 3 yuanes por litro (0,42 €/l), a un ritmo de 9 l/100 km el gasto de hacer 100 kilómetros es de 3,85 euros. Eso es competitivo con el metano, sin la L, que va en depósitos presurizados a 200 bares. El metanol se puede almacenar a temperatura y presión ambiente.

Geely está trabajando para homologar esta tecnología en el mercado europeo. Si el metanol es verde -obtenido de fuentes renovables- las emisiones del pozo a la rueda pueden ser competitivas con coches eléctricos aunque se trate de combustión. No obstante, hay que recordar que se gasta más energía para recorrer 100 km en un híbrido a metanol que recargando baterías para la misma distancia. El metanol también es apto para pilas de combustible, solo que como producto de escape seguimos teniendo emisiones de CO₂.

Desde la empresa matriz defienden esta tecnología:

«El metanol obtenido de fuentes renovables y ecológicas es el camino más realista y efectivo hacia la reducción de emisiones y lograr la neutralidad en carbono. Las ventajas del metanol no solo son teóricas y se han demostrado durante décadas a lo largo del mundo. El metanol como opción de combustible ofrece al mundo un camino hacia un futuro más sostenible y ecológico.»

Eric Li, director de Geely Holding Group

Normal que lo defiendan, son el principal grupo automovilístico en promover esta alternativa tanto para turismos como para camiones. Tras haber invertido 3.000 millones de yuanes (427.555 millones de euros al cambio) Geely ha puesto en las calles de China 20 modelos compatibles con metanol y desarrollado 256 patentes. En China se venden diversas mezclas de metanol, desde el 5% hasta el 100% de pureza.

La patronal automovilística ACEA no se ha mostrado muy proclive. En 2015 publicaron su posición al respecto del metanol mezclado con gasolina fósil, básicamente rechazándolo: es un líquido que puede corroer componentes metálicos del sistema de combustible y degradar plásticos y elastómeros. Entendemos que se refieren a motores sin adaptar, y adaptarlos cuesta un dinero, el que Geely sí se ha gastado, pero ellos no.

China y Geely nos han mostrado el camino. Ahora bien, si pretendemos usar metanol en vehículos térmicos -sean híbridos o no- estos precisan una adaptación, de la misma forma que si pretendemos echar en el depósito biotanol al 100% «a palo seco» y sin adaptación alguna, nos acabamos cargando elementos del coche. Se precisa un desarrollo en los vehículos, crear una red de repostaje, producirlo y distribuirlo…

Ventajas teóricas hay unas cuantas, como favorecer la independencia energética, alargar la vida útil de los vehículos térmicos en aplicaciones difícilmente electrificables, reducir emisiones… Pero no le podemos pedir a los fabricantes que destinen recursos para esto después de la mala experiencia con los famosos motores Flexifuel para E85/E100, siendo la prioridad total electrificarse. Si acaso puede ser un filón para la industria transformadora, otra cosa es que Geely tenga éxito promocionando esto en Europa partiendo del caso de éxito chino.