El Renault Captur es, junto con el Clio, el principal superventas de la marca francesa en el mercado europeo. Este popular B-SUV dispone actualmente de una de las gamas de motorizaciones más variadas de su categoría, pues está disponible en versiones a GLP, mild-hybrid (MHEV), híbridas (HEV) e híbridas enchufables (PHEV).
Sin embargo, Renault podría ir un paso más allá en su próxima generación, pues de acuerdo con el medio francés Caradisiac, en su tercera entrega el todocamino solo estará disponible como híbrido (HEV y PHEV) y eléctrico (BEV), eliminando por el camino las variantes mild-hybrid y a gas.
Su llegada en 2025 coincidirá con la aprobación de la nueva normativa de emisiones Euro 7, mucho más restrictiva que la actual. La compañía espera que, gracias a su avanzada tecnología híbrida E-TECH, el Captur pueda seguir vendiéndose con motores de combustión interna hasta 2030, año en el que Renault dejará de vender coches térmicos en el viejo continente para pasar a centrarse en los eléctricos puros.
Mientras que los Captur HEV y PHEV seguirán haciendo uso de la plataforma modular CMF-B, el modelo BEV empleará su derivada eléctrica, conocida como CMF-BEV. Esta arquitectura, que debutará un año antes con los nuevos R5, 4L y Nissan Micra, permitirá una reducción de costes del 33% en relación al actual ZOE.
El Captur es uno de los modelos más importantes de Renault
Aunque será algo más grande que el Megane E-TECH Electric, su precio será inferior, pues el hatchback se asienta sobre la más refinada plataforma CMF-EV. Dentro de la oferta de SUV eléctricos de Renault, el Captur III se situará entre el antes mencionado 4L, que rondará los cuatro metros de largo, y el nuevo Scénic, que se irá a cuatro metros y medio.
Dado que utilizará la plataforma CMF-BEV, es de esperar que, al igual que los R5 y 4L, emplee un pack de baterías con celdas NCM de origen Envision AESC. Su autonomía debería rondar los 400 km WLTP. Para que los R5, 4L y Captur no se solapen en sus versiones más costosas con el Megane E-TECH Electric, se espera que en un par de años este último pierda su variante EV40 (300 km WLTP).
Por lo tanto, a mediados de la década la oferta eléctrica de Renault estará integrada por los R5, 4L, Captur, Megane y Scénic, a los que deberíamos sumar tres modelos de Alpine (un hot hatch, un crossover y un deportivo desarrollado con Lotus), la segunda generación del Dacia Spring y varias furgonetas cero emisiones.
Fuente | Caradisiac
