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Qué necesito para ser independiente energéticamente. Coste de la instalación solar más batería

Los desbocados precios de la electricidad y los combustibles, sumado al rally imparable del gas, hace que cada vez más personas se pregunten por alternativas para reducir su factura eléctrica mediante un sistema solar. Pero también hay algunos que quieren ir un paso más allá y declarar su independencia energética absoluta. Algo complejo, pero posible gracias a la reducción del coste de elementos como los paneles solares y las baterías.

Por supuesto, los cálculos son siempre muy relativos ya que no es lo mismo una vivienda en la parte soleada de España que en la nublada. Algo que puede hacer que el presupuesto para lograr una independencia cercana al 100% pueda ser muy diferente.

También por supuesto, dependerá de los hábitos y consumos de la vivienda. Ya que al igual se puede aplicar que no es lo mismo una vivienda con uno o dos coches eléctricos y calefacción por aerotermia, que una sin coche eléctrico y calefacción por biomasa, gas o gasóleo.

El coste de la independencia energética

Aplicación PVGIS de la UE

Pero podemos hacer una estimación aproximada para ver cuán cerca o lejos podrán estar las viviendas en nuestro país de la independencia energética más extrema. Para ello vamos a necesitar:

  • Una vivienda unifamiliar
  • Un sistema fotovoltaico de 8 kWp
  • Una batería de entre 10 y 20 kWh
  • Un generador gasolina de emergencia

Si, como veréis es recomendable gastarse unos euros en un generador de emergencia si lo que queremos es directamente desconectarnos de la red. Una opción extrema que no es la más recomendable desde el punto de vista económico ni práctico, pero que puede ser atractiva para los más convencidos, o simplemente para los que llevar el tendido eléctrico hasta la vivienda sea imposible o extremadamente costoso.

Y es que un generador no es un elemento demasiado costoso. Podemos encontrar modelos básico de 3.3 kW, suficiente para cubrir las necesidades básicas durante cortos periodos de tiempo, por poco más de 500 euros. O modelos algo más completos con inversor por 1.000 euros.

La instalación fotovoltaica

La pregunta de muchos será que cuántos kW necesitaremos en nuestra vivienda. De nuevo insistimos que dependerá de la localización e incluso orientación de la instalación. Pero la UE cuenta con una sencilla y útil aplicación web que nos permite hacer una simulación para tener datos aproximados.

Por ejemplo, una instalación de 8 kWp, con orientación sur, instalado en tejado a 35 grados, y con unas pérdidas estimadas de un 8%, tendrá una capacidad de producción mínima de 481 kWh al mes en Santiago de Compostela (enero) y una máxima de 1.044 kWh (julio).

Por lo contrario esta misma instalación en Alicante logrará una producción mínima de 884 kWh (noviembre) y una máxima de 1.315 kWh (agosto). Algo que nos indica que en Alicante podremos obtener una cantidad de energía similar a la de Santiago con entre 5 y 6 kW instalados.

El coste de esta instalación suele depender de la cantidad de paneles que pongamos. Pero no es un crecimiento lineal. Por ejemplo, un presupuesto de 3 kW puede tener un coste estimado de unos 6.000 euros. Pero elevarlo hasta 5 kW no disparará su precio llegando a unos 7.000 euros. Y es que los paneles en si no son caros.

Por ejemplo, en la red podemos encontrar kits fotovoltaicos de 8 kW por 4.672 euros, incluyendo inversor. Si sumamos estructura y mano de obra el coste de la instalación puede llegar a los 7 u 8 mil euros. Costes antes de las ayudas del gobierno que aporta un 40%.

La batería

Pero aunque con esta instalación podremos lograr un elevado nivel de independencia, esta la lograremos solo con una batería de respaldo. Un acumulador que supone una importante inversión y que posiblemente no logremos amortizar siendo mejor opción la compensación de excedentes.

Pero sabemos que del dicho al hecho hay un trecho, y España no es un mercado muy fiable en cuanto a la relación del cliente con las empresas eléctricas. Algo que hace que la inversión en una batería sea un esfuerzo que nos permita aumentar nuestra independencia del oligopolio y llegado el momento, incluso cortar los cables de la red.

Unas baterías que han bajado de forma importante de precio, y en el mercado encontramos alternativas como la de la china BSL, que cuenta con un modelo dotado de inversor y preparada para trabajar tanto conectada como desconectada de la red.

Esta batería puede disponer de una capacidad de entre 10.2 y 20.4 kWh útiles, con una potencia de salida nominal de 5.5 kW, y una máxima de 6.5 kW. Está formada por las robustas celdas LFP, que le otorgan una larga vida útil que supondrá mantener el 80% de carga después de 6.000 ciclos. (Ver ficha técnica)

Una batería que en el caso de la versión de 10 kWh tiene un precio de distribución de 5.476 euros, que sube hasta los 8.725 euros para la de 20 kWh.

Una batería que según los datos medios que proporciona Red Eléctrica Española, cubrirán la mayor parte de las necesidades de una vivienda media durante un día, 9.6 kWh/día en 2021. Por supuesto, aquí entra en juego el consumo de cada uno y donde dependerá de nuestros hábitos y configuración en cuanto a climatización o movilidad.

El resumen aproximado sería el siguiente:

  • Sistema fotovoltaico de 8 kW con inversor: 8.000 euros
  • Batería de respaldo de 10 kWh: 5.476 euros
  • Batería de respaldo de 20 kWh: 8.725 euros
  • Generador gasolina 3.3 kW: entre 500 y 1.000 euros
  • Total: entre  13.900 y 17.225 euros 

Como vemos, los precios no incluyen ayudas del gobierno, que nos permitirían añadir un 40% de descuento en el sistema solar y la batería, pero tampoco incluyen el coste de instalación y el margen del instalador de dicha batería. Por lo que hablamos de un presupuesto estimado tirando a pesimista.

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