Giga Berlin tendrá un papel importante en el aumento de ventas de Tesla en Alemania

La fábrica alemana de Tesla va dejando atrás todos los problemas iniciales y ya trabaja a un ritmo de 2.000 unidades a la semana del Tesla Model Y. Este modelo está posicionándose como el coche eléctrico más vendido del mundo, y uno de los coches más vendidos del mundo (a secas). Sin embargo, en el mercado alemán hay trabajo por delante.

El país europeo que más coches matricula es, con diferencia, Alemania. Entre enero y agosto se han matriculado allí 55.000 unidades (+37%) de la marca americana, lo cual equivale a una cuota de mercado discreta, el 1,5%. El objetivo de Tesla es llegar a unas 80.000 unidades al término del año, lo cual ya entraría en el terreno de marcas asentadas como son Toyota, Hyundai o Ford.

Hay que tener en cuenta que en Alemania no solo se matriculan coches para consumo de los propios alemanes, una parte relevante acaba en otros países de la eurozona, como Dinamarca, lo que ha espoleado un negocio legal aunque cuestionable a base de subvenciones a la compra. Eso cambiará el año que viene, pero mientras tanto, la laguna legal sigue en vigor.

El rendimiento en el cuarto trimestre será clave. Aunque el grueso de las matriculaciones de Tesla dependen de la fábrica de China, que está produciendo más que nunca al entrar en funcionamiento la capacidad ampliada, la producción local permite acortar tiempos de espera por la simple razón de un menor tiempo de transporte.

Tesla podría más que doblar su ritmo de entregas en Alemania durante el cuarto trimestre, por lo que haría un buen «roto» a las marcas tradicionales y tendría un mayor peso entre los grandes. A plazo más largo, la producción local podría contener la escalada de precios de los últimos meses y aumentar la demanda al reducir lista de espera. Hablamos de coches caros, las esperas no se ven con buenos ojos siempre.

Sin duda será un trimestre muy desafiante, dada la gran dependencia de Alemania de un gas ruso que ya apenas va a llegar. Aunque se firmase la paz mañana mismo, y Putin se jubilase políticamente, los gasoductos Nord Stream 1 y 2 están inutilizados con carácter indefinido, por no decir permanente, tras unas misteriosas explosiones. Algunos fabricantes ya han hecho planes de contingencia por si reciben la orden de parar máquinas ante la posibilidad de cortes de suministro eléctrico o de gas. Y Tesla está lejos, como otros fabricantes germanos, de ser energéticamente independiente.

Vía | Clean Technica