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La nueva suspensión de BMW transforma los baches en electricidad

La búsqueda de la eficiencia en los coches eléctricos es cada vez más relevante para la industria del automóvil. BMW lo sabe y ha buscado un nuevo modo de generar energía que permita incrementar la autonomía de sus vehículos.

BMW sabe que una de las claves para triunfar en el mercado de los coches eléctricos es la eficiencia y, para ello, ha diseñado una suspensión que tiene la capacidad de aprovechar las irregularidades del terreno para producir electricidad.

La competitividad es feroz en el mercado de los coches eléctricos y, tratándose de una tecnología en expansión, los fabricantes saben que no pueden dormirse en los laureles si quieren subirse al tren del cambio. La transición ha comenzado y ya es imparable, por lo que cada una de las marcas presentes en la industria corre el riesgo de fracasar si no avanza y se adapta al nuevo escenario global.

A nivel tecnológico, la clave está en aprovechar al máximo la energía. En ese sentido, ya existen sistemas como la frenada regenerativa, que aprovecha el movimiento del vehículo en fase de desaceleración para recargar las baterías.

Producir energía gracias a los baches

El enfoque de BMW en esta ocasión es diferente: se trata de aprovechar el movimiento de la suspensión durante el trayecto para producir electricidad. Realmente no es un enfoque inédito, ya que empresas como GIG Performance ya desarrollan un concepto parecido en camiones. Sin embargo, BMW pretende ir un paso más allá e introducir este sistema en sus modelos electrificados, según informa Carbuzz.

Esquema de suspensión regenerativa patentado por BMW. Foto: Carbuzz

El concepto básico es sencillo: los resortes de la suspensión tienen como misión principal absorber la energía generada por los baches de manera que esta no se transfiera al habitáculo. Gracias a ello, las ruedas se mantienen en todo momento en contacto con el asfalto los ocupantes del vehículo van mucho más cómodos. Por tanto, BMW quiere aprovechar esa energía que generan los baches en la suspensión, transformando el movimiento oscilante de los elementos de la misma en electricidad.

Cómo funciona la suspensión de BMW que recupera energía

En concreto, el sistema de la marca alemana consta de un generador instalado en el chasis, al que se le acopla un pequeño volante y un embrague unidireccional en su entrada. Dicho generador es impulsado por un disco de accionamiento que, a su vez, está conectado a un brazo de control de suspensión mediante un actuador parecido a una barra estabilizadora convencional.

En el momento en el que la suspensión se comprime por acción de un bache, la barra estabilizadora se mueve y hace girar el disco de accionamiento con el embrague desacoplado. Cuando la suspensión se expande, el disco de accionamiento vuelve a girar conjuntamente con la barra estabilizadora, pero ahora el embrague unidireccional sí está acoplado e impulsa el mecanismo que hace mover el volante del generador. Finalmente, el generador transfiere la electricidad a las baterías.

Es de esperar que BMW incorpore la suspensión regenerativa a sus modelos eléctricos más caros.

Esto es así porque BMW tiene en cuenta que el movimiento de compresión de la suspensión suele ser repentino y la energía del mismo necesita ser transferida al resorte de manera muy rápida y sin interferencias. En cambio, el movimiento posterior de expansión o rebote implica más tiempo y permite transferir la energía de manera más eficaz y con menor interferencia en el comportamiento natural de la suspensión.

De momento, el sistema de recuperación de energía a través de la suspensión de BMW es sólo una patente. Por tanto, aún está por ver en qué modelos podrá verse en el futuro, aunque una cosa es cierta: no será barato.

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