El Volkswagen ID.2 es la gran esperanza eléctrica del fabricante alemán para el mercado europeo tras la relativamente tibia acogida del ID.3, cuyas ventas se han visto superadas incluso por las del ID.4 a pesar de que este último es más costoso. El nuevo utilitario, que tendrá un precio de partida inferior a los 25.000 euros, está llamado a sustituir al popularísimo Polo.
Adelantado por el prototipo ID. 2all concept, este hatchback de cinco puertas y 4,05 metros de largo ofrecerá una habitabilidad equivalente a la de un modelo de segmento superior y un amplísimo maletero de 440 litros gracias al uso de la nueva plataforma de tracción delantera MEB Entry. Su lanzamiento comercial tendrá lugar a mediados de 2025.
Consciente de que incluso en los segmentos de nivel de entrada los SUV llevan la voz cantante, Volkswagen también desarrollará un asequible todocamino eléctrico a partir del ID.2. Este modelo de 4,10 metros de largo será hermano del SUV de acceso que Skoda anunció hace apenas unos días; de hecho, ambos se fabricarán en la planta española de Landaben (Navarra).
Todavía no está claro cuál será su denominación comercial, pues la compañía se encuentra evaluando varios sistemas de nomenclaturas para su renovada gama eléctrica. Entre los nombres sobre la mesa se encuentran ID.2 X e ID. Roc.
El Volkswagen ID.2 X tendrá un hermano de Skoda
Al igual que el ID.2, el ID.2 X estará disponible con dos baterías, una de tipo LFP (litio-ferrofosfato) con 38 kWh de capacidad y otra NCM (níquel, cobalto, manganeso) de 56 kWh. En ambos casos, los packs utilizarán las nuevas celdas prismáticas unificadas del Grupo Volkswagen, que se producirán en una nueva gigafábrica ubicada en Sagunto (Valencia).
En sus versiones más prestacionales, el Volkswagen ID.2 X ofrecerá una potencia máxima de 226 CV (166 kW) y una autonomía superior a los 400 km WLTP. Su velocidad punta se situará en 160 km/h, y solo estará disponible con tracción delantera. En cuanto a la carga, llegará a 11 kW en corriente alterna y a 125 kW en corriente continua (10-80% en 20 minutos).
Aunque será más caro que el ID.2 convencional, seguirá tratándose de un coche eléctrico relativamente asequible, por lo que no debería alejarse demasiado de la barrera psicológica de los 25.000 euros. Por supuesto, dispondrá de un amplio arsenal tecnológico, incluyendo el sistema de conducción semi-autónoma Travel Assist, faros Matrix LED IQ.LIGHT, Park Asisst Plus con función memoria, asientos eléctricos con masaje, techo panorámico…
Fuente | Autocar
