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Recargar un coche eléctrico es un 80% más barato que repostar un coche gasolina en España

El pasado año los precios de la electricidad sufrieron una espectacular subida por el shock de la guerra de Ucrania y el papel del gas en la fijación de precios. Pero este año la situación es totalmente diferente, volviendo las tarifas eléctricas a la normalidad. Es por eso que vamos a repasar las cuentas actualizadas a la hora de comparar los costes operativos o el coste total de propiedad entre un coche eléctrico y un coche gasolina y diésel medios.

En este caso, analizaremos los costes de un eléctrico y un gasolina para un conductor que recorre 20,000 kilómetros al año, tomando en cuenta un consumo de 16 kWh a los 100 km para el eléctrico y 7 litros a los 100 km para el gasolina.

En este caso como siempre habrá quien diga que hay coches gasolina que consumen menos, pero también hay muchos que consumen más. Lo mismo en el caso del eléctrico, por lo que tomamos estas cifras como estimadas y luego cada uno simplemente tendrá que adaptar el cálculo del consumo y el coste según las cifras que crea se adaptan mejor a su tipo de vehículo.

En el caso del coche eléctrico, el consumo de 16 kWh a los 100 km implica que éste consumirá 3.200 kWh para recorrer 20.000 km al año. El precio de la electricidad dependerá de varios factores, empezando por el contrato eléctrico que tengamos, pero también el horario en el que vayamos a cargar, e incluso si tenemos que echar mano a menudo de las redes de carga públicas, mucho más costosas.

Por ejemplo, en un contrato como el de Gana Energía, con tres tramos: valle, llano y punta, vemos que el precio mínimo con impuestos es de 11 céntimos el kWh, el intermedio de 13 céntimos, y el máximo son 18 céntimos el kWh, esto supondría que cargando en el tramo más económico el conductor tendría un coste anual para esos 20 mil kilómetros de 352 euros, en el caso intermedio de 416 euros, mientras que si solo recarga en el tramo más caro serían 576 euros.

En este último caso, el cliente tendría mejores ofertas en el mercado libre en contratos de coste fijo, donde podemos encontrar ofertas como el contrato Conecta de Endesa, con un coste fijo de 13.9 céntimos de euro el kWh las 24 horas. Por lo que el coste anual en este caso sería de 444 euros.

Por su parte, el propietario de un coche de gasolina con un consumo medio real de 7 litros a los 100 km implica que el coche consumirá 1.400 litros para recorrer 20.000 km al año. Multiplicando esto por el precio de la gasolina, que hoy marca una media en España de 1.604 euros el litro, el coste anual de combustible para el coche de gasolina sería de 2.245 euros.

Un cliente que conduzca un coche diésel, que después de un duro 2022 ha visto como las cifras han vuelto a la normalidad, y que tenga un consumo medio de 6 litros a los 100 km, con un coste de 1.43 euros el litro, verá como su factura anual se coloca en los 1.716 euros.

Mantenimiento y costes adicionales

Cada cuánto tiene que pasar la revisión un coche eléctrico
Cada cuánto tiene que pasar la revisión un coche eléctrico

Además del combustible, el mantenimiento y los costes adicionales son factores a tener en cuenta. Los coches eléctricos suelen tener un menor número de piezas móviles en comparación con los vehículos de gasolina, lo que se traduce en un menor mantenimiento y menores costos asociados. No requieren cambios de aceite ni filtros de aire, y los frenos regenerativos ayudan a preservar las pastillas de freno. Estos factores pueden reducir significativamente los costes operativos.

Los vehículos de gasolina, por otro lado, requieren cambios de aceite regulares, filtros de aire y otras tareas de mantenimiento periódicas. Estos costos pueden variar según el modelo y la marca de forma sustancial.

Resumen:

Con estos datos sobre la mesa, podemos ver que después de cinco años y 100.000 kilómetros, los gastos estimados de cada modelo solo teniendo en cuenta el coste del carburante o la recarga serían los siguientes:

  • Coche eléctrico, carga doméstica, contrato coste fijo: 2.220 euros
  • Coche eléctrico, carga doméstica, tramo valle: 1.760 euros
  • Coche eléctrico, carga doméstica, tramo llano: 2.080 euros
  • Coche gasolina, consumo 7 litros a los 100 km: 11.245 euros
  • Coche diésel, consumo 6 litros a los 100 km: 8.580 euros

En el caso de los coches con motor de combustión, el mantenimiento periódico incluye cambios de aceite y filtros, revisión de frenos entre otros elementos. Estos servicios se deben realizar según las recomendaciones del fabricante, que suelen estar especificadas en el manual del propietario del vehículo.

En términos de costes aproximados, que dependerán en gran medida del modelo y sobre todo de la marca, podemos esperar gastar entre 300 y 600 euros al año en el mantenimiento básico de un coche diésel que recorre 20,000 kilómetros, lo que añadirá una media de unos 2.200 euros cada cinco años a la cuenta de gastos.

En caso de los eléctricos, también puede hacer grandes diferencias con marcas que obligan a una revisión cada 15.000 kilómetros, y con un coste de entre 150 y 300 euros al año, mientras que otras como Tesla recomiendan, que no obligan, a una revisión básica cada 2 años sin indicar kilometraje recomendado, y que tiene un coste de unos 130 euros.

¿Cómo medir la degradación de la batería de un coche eléctrico? Esta guía nos ayuda a lograrlo

Muchos se preguntarán como estará la batería del coche eléctrico después de 100.000 kilómetros. Y es que es una cifra que para el coche de combustión todavía es una cantidad contenida, y según el  Observatorio de la Movilidad de Arval, de media los coches en España tienen en su marcador más de 150.000 kilómetros.

Para un coche eléctrico, esta cifra tampoco es un problema. Incluso para los coches de las primeras generaciones, salvo algunas excepciones donde el rendimiento de la batería ha sido anómalo. Pero por ejemplo en mi caso, un Renault ZOE ZE40 con más de 100.000 km según el medidor de salud de la batería, este indica que mantiene el 85% de la capacidad. Algo que se traduce en que la autonomía apenas ha variado desde que se ha estrenado.

Una situación que según aumentan las capacidades de las baterías, hace que se minimice la degradación al ser más fácil mantener el nivel de carga óptimo de forma más frecuente, lo que alarga la vida útil del pack.

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