Desde hace unas semanas, el sindicato sueco IF Metall ha comenzado una huelga contra Tesla por la negativa del fabricante norteamericano de firmar un convenio colectivo. Una situación que ahora se está extendiendo a otros mercados, con el anuncio de los trabajadores de Noruega, y de la amenaza de grandes inversores, como el mayor fondo de pensiones de Dinamarca, de vender todas sus acciones en Tesla en solidaridad con los trabajadores.
Como recordamos, la situación tenía una dimensión muy pequeña y muy localizada. La huelga partía de apenas 130 empleados de una decena de talleres repartidos por siete ciudades de Suecia. Pero finalmente, después de no lograr llegar a un acuerdo, otros actores se están sumando a este auténtico choque cultural entre las formas de Silicon Valley y las europeas.
Según informan los medios noruegos, el mayor sindicato del sector privado de Noruega ha confirmado que bloqueará los envíos de coches de Tesla destinados al mercado sueco. Una medida que se enmarca dentro de un creciente movimiento en los países del norte de Europa para apoyar a los mecánicos en huelga en Suecia.
Los trabajadores portuarios en Suecia ya se niegan a descargar los coches de Tesla que llegan por barco, y amplios grupos de electricistas, limpiadores, trabajadores postales y al menos un proveedor sueco, también dijeron que negarían sus servicios a la empresa.
El sindicato noruego Fellesforbundet dijo que tenía la intención de enviar una «señal alta y clara a Tesla» y que harán lo necesario para garantizar que cualquier envío de vehículos a través de Noruega a Suecia fuera bloqueado. Una acción que comenzará ya este próximo día 20 de diciembre, lo que tendrá impacto en las entregas de final de año.
Al conflicto se ha sumado PensionDanmark, uno de los fondos de pensiones más grandes de Dinamarca, que ha dicho que había decidido vender sus acciones en Tesla debido a la negativa del fabricante de vehículos eléctricos a cerrar los acuerdos con los sindicatos por lo que según la nota de prensa: «Ahora incluimos a Tesla en nuestra lista negra«.
También en Dinamarca, el sindicato 3F ha indicado que apoyarán la huelga de sus compañeros suecos, y que denegarán la descarga de coches de Tesla en sus puertos que tengan como destino Suecia.
Y es que de momento el conflicto se centrará exclusivamente en los coches con destino al país nórdico. Pero Tesla corre el riesgo de contagio a otras regiones si continúa anclada en su política de no poner en marcha convenios colectivos. Algo que afectará irremediablemente a sus entregas, pero también puede ser un duro golpe a su imagen en una de las regiones con mayor ventas.
Los huelguistas de Suecia serán despedidos
En un nuevo capítulo de esta batalla, el sindicato IF Metall ha confirmado que Tesla ha pedido a los empleados que se han movilizado a que acudan a las instalaciones a recoger sus pertenencias personales, lo que indican, supondrá su despido.
Algo que tendrá como consecuencia, según los responsables de la iniciativa, que la huelga será mucho más duradera de lo inicialmente previsto.
