
Las marcas chinas crecen en Europa a pesar de los aranceles, pero sus coches eléctricos ceden terreno
Las cifras del pasado mes de febrero denotan cómo las marcas chinas siguen ganando protagonismo en el mercado europeo. Sin embargo, con las cifras de vehículos eléctricos en la mano, no podemos negar que los aranceles están teniendo efecto.

Si los aranceles impuestos por Trump están siendo (y serán) uno de los principales temas de conversación en este 2025, no nos olvidemos las tarifas impuestas por la Comisión Europea a los coches eléctricos fabricados en China el pasado año 2024. Parece que todo el mundo se ha olvidado de la polémica generada entre Europa y China a razón del vehículo eléctrico, pero sigue todavía muy presente.
Y la cuestión es, ¿están afectando de verdad los aranceles a los coches eléctricos chinos? Si miramos al pasado mes de febrero, los datos publicados por Dataforce dan a entender que sí que se están resintiendo, aunque ligeramente, lo que no quiere decir tampoco que las marcas chinas estén en problemas. Todo lo contrario: las 38.902 unidades vendidas por los fabricantes chinos ese mes supuso un aumento del 64% respecto a las cifras del año anterior. De esta forma, la cuota de mercado de estas marcas pasó del 2,5% al 4,1%, y la tendencia es al alza.

Ahora bien, en este punto hay que enfatizar, porque los coches eléctricos procedentes desde China supusieron 11.116 unidades, un 3,4% menos que el año anterior. Y todo ello, en un mes en el que las ventas de coches eléctricos crecieron en Europa de forma global en un 26%, hasta un total de 164.600 unidades.
Por su parte, los híbridos enchufables chinos representaron una parte más pequeña del pastel: 4.744 unidades; sin embargo, vivieron un incremento del 321% respecto al año pasado, siendo los BYD Seal U DM-i, MG HS y Jaecoo 7 los vehículos chinos con tecnología PHEV más populares en suelo europeo. Obviamente, dentro del crecimiento de las marcas chinas, las versiones de combustión y las híbridas autorrecargables (HEV) siguen siendo claramente protagonistas, especialmente en las marcas de Chery (Jaecoo y Omoda), así como en MG.
Recordemos que las marcas chinas se enfrentan desde el año pasado a unos aranceles adicionales al 10% ya instaurado, y que en el peor de los casos asciende a un 35,3% extra. Estas tarifas estarán vigentes durante cinco años, a menos que varíen fruto de las negociaciones entre los dos gigantes comerciales. El descenso de las ventas parece reducido, pero sí que muestra un ligero frenazo al crecimiento de los coches eléctricos chinos que, no obstante, puede variar la tendencia dentro de muy poco.

Especialmente cuando marcas como BYD inicien sus operaciones europeas de producción de sus coches eléctricos en apenas unos meses. El gigante chino, que muestra las cifras de mayor crecimiento entre los fabricantes de su país en Europa, está muy cerca de abrir sus primeras fábricas en Europa: su planta en Hungría, prevista para este año, mientras que la de Turquía iniciará operaciones el año que viene. Chery ya está instalada en la Zona Franca de Barcelona e irá ganando más protagonismo con el paso del tiempo, lo mismo que Leapmotor de la mano de Stellantis, así como Xpeng y GAC en la fábrica de Magna en Austria.
«La producción local podría convertirse en la principal vía para que las empresas automotrices chinas entren en el mercado europeo en el futuro. Este enfoque, similar al que utilizaron los fabricantes japoneses para entrar en los mercados occidentales, ayuda a obtener el reconocimiento de los gobiernos locales y a comprender mejor las necesidades del mercado local con la participación local», resume Ji Xuehong, director del Centro de Investigación de Innovación de la Industria Automotriz de la Universidad Tecnológica del Norte de China.
Fuente | CarNewsChina