Volkswagen prepara su arma secreta contra los fabricantes de coches eléctricos chinos
Volkswagen continúa avanzando en el desarrollo de la plataforma SSP, una arquitectura de nueva generación que servirá como base para la práctica totalidad de sus futuros modelos eléctricos.
Volkswagen ha congelado las especificaciones de su próxima plataforma eléctrica, la SSP (Scalable Systems Platform), una arquitectura extremadamente ambiciosa que sustituirá de un plumazo a las actuales MEB y PPE. Gracias a su gran flexibilidad, debería servir como base para la inmensa mayoría de coches eléctricos del grupo, desde pequeños utilitarios hasta prestacionales deportivos.
El principal objetivo detrás de este proyecto es simplificar el proceso de desarrollo de los futuros modelos eléctricos de la compañía, siendo este uno de los pilares fundamentales para recortar distancias con rivales como el gigante chino BYD, que ha desbancado a la estadounidense Tesla como líder indiscutible en el sector de la electromovilidad.
La SSP contará con un total de ocho variantes; además, las filiales del grupo podrán adaptar de forma individual la base para que cumpla con sus requisitos. La nueva plataforma supondrá un importante salto adelante respecto a sus predecesoras en aspectos como la autonomía, los tiempos de carga, los sistemas de asistencia a la conducción y la digitalización, permitiendo el desarrollo de vehículos definidos por software.
El primer modelo europeo basado en la plataforma SSP se presentará en 2027 y se pondrá a la venta en 2028. Los rumores apuntan a que los encargados de estrenarla serán los Porsche Taycan y Panamera de nueva generación, que harán uso de la SSP Sport. En 2028 le tocará el turno al Volkswagen Golf, que utilizará su versión compacta.
El Volkswagen Golf de novena generación será uno de los primeros eléctricos basados en la plataforma SSP
En China no tendrán que esperar tanto, pues ya en 2027 arrancará la comercialización de un vehículo asentado sobre la plataforma CSP, una versión de la SSP adaptada al mercado local. Un punto de interés es que la SSP permitirá la creación de coches eléctricos con extensor de autonomía térmico, aunque se espera que esta opción se ofrezca principalmente en Asia y Norteamérica, no en el viejo continente.
La plataforma CSP integrará una arquitectura eléctrica y electrónica propia (CEA) desarrollada con XPeng. La SSP por su parte utilizará una arquitectura de software creada con Rivian. Dicho sistema se estrenará en 2027 con el ID.1, el cual se basará en una versión modificada de la MEB, por lo que es posible que más adelante también llegue a los CUPRA Raval, Skoda Epiq y Volkswagen ID.2 e ID.2 X.
Fuente | ecomento
