Esta semana se ha producido uno de los actos más importantes dentro del mundo de la automoción en los últimos años, la presentación del Renault ZOE, mucho más que un simple coche eléctrico ya que por sus características y precio, se convertirá en una seria alternativa a los coches con motor de combustión.
Pero como todos los Renault, el ZOE logra un precio de salida atractivo, desde 14.700 euros, gracias a que no seremos propietarios de la batería, una batería por la que tendremos que pagar un alquiler al fabricante, que además de un coste mensual, nos pondrá un límite de kilómetros anuales. Por lo tanto, a falta de conocer nuevos contratos que nos permitan aumentar la cifra de kilómetros a recorrer, con un incremento del alquiler, nos preguntamos ¿es rentable el ZOE respecto a su competencia?
Partimos de los datos que disponemos del ZOE, estos son un precio de salida de 14.700 euros, anclado a un alquiler de la batería de 79 euros al mes durante un contrato de tres años y 12.500 kilómetros. Con una batería de 22 kWh y una autonomía oficial de 200 kilómetros, nos da un consumo, aproximado, de unos 12 kWh cada 100 kilómetros.
Esto supone que con el kWh a unos 0,18 euros, cada 100 kilómetros con el ZOE nos costarán 2,16 euros, y recorrer los 12.500 kilómetros anuales de nuestro límite nos saldrá en 270 euros. A esto le tendremos que sumar los 79 euros mensuales del alquiler de la batería, que cada año nos saldrá por 948 euros, hagamos los 12.500 kilómetros o hagamos 0.
Durante el primer año el ZOE nos costará entre alquiler de la batería y consumo eléctrico unos 1.200 euros, lo que multiplicado por tres años de contrato, sin tener en cuenta subidas del coste de la electricidad, 3.600 euros, por lo que 36 meses después habremos desembolsado 14.700 euros por el coche más 3.600 por el consumo eléctrico y alquileres, en total, 18.300 euros.
Una vez terminado el contrato, es de esperar que Renault nos renueve el mismo y aunque es una incógnita que sucederá, es de suponer que con una batería con solamente 37.500 kilómetros, seguiremos con la misma con una simple revisión del alquiler, que como no tenemos información, nos atreveremos a aplicar una reducción del 10%, por lo que los siguientes 36 meses pagaremos unos 71 euros mes.
Por lo tanto, los siguientes tres años tendremos que desembolsar los 71 euros mensuales del alquiler que supondrán después de 36 meses 2.556 euros, a los que tendremos que sumar los 800 euros del consumo eléctrico, lo que nos da como resultado 3.300 euros.
Por lo tanto consumidos seis años y 75.000 kilómetros con el ZOE nos habremos gastado:
Resumen:
14.700 euros, compra del coche
Alquiler baterías, 5.400 euros
Coste eléctrico, 1.600 euros
Total: 21.700 euros
¿Como sería esto con la competencia?
A nivel económico, el único modelo que se puede comparar con el ZOE son los Peugeot iOn, Citroën C-Zero, ya que el Nissan Leaf además de un tamaño mucho mayor, está económicamente también por encima por sus 29.950 euros. Es una comparativa donde el ZOE juega con ventaja a nivel técnico ya que es un coche que cuando llegue al mercado, lo hará con casi dos años de retraso respecto a los modelos franceses, que además tienen el hándicap de ser una adaptación, no un modelo creado específicamente para llevar un sistema eléctrico, pero para la comparativa…es lo que tenemos.
Un iOn/C-Zero nos saldrá en el concesionario por 23.550 euros, un precio al que no tendremos que sumar ningún alquiler por su pequeña batería de 16 kWh, que le proporcionan una autonomía oficial de 150 kilómetros.
El consumo oficial de estos modelos es prácticamente el mismo que el ZOE, 13 kWh cada 100 kilómetros, por lo que recorrer 100 kilómetros nos saldrá por 2,34 euros, y los 12.500 anuales por 292 euros. Después de tres años y 37.500 kilómetros tendremos un gasto de 876 euros, que multiplicado por dos nos indica que al finalizar los seis años y 75.000 kilómetros habremos desembolsado:
Resumen:
23.550 euros, compra del coche
Alquiler baterías, 0 euros
Coste eléctrico, 1.752 euros
Total 25.300 euros
Como vemos, en total el Peugeot/Citroën nos habrá costado 25.300 euros, contando la compra y el gasto eléctrico, lo que suponen 3.602 euros más que si optásemos por el ZOE, un sobre coste que nos permite además de ser los propietarios de una batería con menos de la mitad de su vida recorridos, no tendremos límite anual de kilómetros a recorrer.
Por lo tanto, a corto y medio plazo el Renault ZOE se impone como mejor opción, pero con la desventaja de que no sabemos que sucederá con nuestro contrato, una información que desconocemos la razón para que permanece oculta por parte de Renault, lo que estamos seguros que retraerá a muchos compradores recelosos de firmar lo que ahora mismo es un cheque en blanco a favor del fabricante francés, una desconfianza que se podría diluir de un plumazo aclarando lo que sucederá al finalizar los 36 meses de contrato.
Pero incluso con este vacío de información, el Renault ZOE será un previsible éxito arrollador que esperamos tenga sus efectos secundarios, como una bajada de precios de la competencia, lo que nos obligaría a rehacer todos nuestro cálculos, por lo menos eso esperamos.
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