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El coche eléctrico comienza a despegar en Europa. Crecimiento del 61% en el tercer trimestre

Los coches eléctricos, junto con los híbridos enchufables, han ocupado el 1.6% de las ventas de turismos en Europa el tercer trimestre. Una cifra que supone la mejor hasta el momento y que marca una dinámica positiva que contrasta con la negativa de tecnologías como los coches diésel. Sin duda una buena noticia para nuestra salud.

Según los datos de la ACEA, la asociación de fabricantes de Europa, durante el pasado trimestre las ventas de coches eléctricos a batería han crecido un 60.9%, las de híbridos enchufables un 53.2%, y las de híbridos convencionales un 59.7%.

Frente a las alternativas eléctricas, o electrificadas, podemos ver ejemplos de otras tecnologías alternativas algo más maduras que no crecen al mismo ritmo, y como ejemplo el 38.1% de crecimiento del GLP (gas licuado del petróleo) o el 12.9% de incremento del gas natural.

El éxito del modelo de Francia para el coche eléctrico basado en puntos de recarga y ayudas. Supera el 2% en septiembre y llegan a los 20 mil puntos públicos

Pero sin duda la mejor noticia es la bajada de matriculaciones de los modelos dotados de un sistema diésel. El efecto del Dieselgate está haciendo mella en estos contaminantes modelos, que en los seis primeros meses del año han visto bajar sus ventas un 4.3% respecto al pasado año.

Está claro que muchos de los clientes del diésel se han fugado a otras tecnologías contaminantes, como los gasolina, pero como podemos ver, la dinámica es bastante clara a favor de los modeles dotados de sistemas de propulsión alternativos.

A esto ayudará la puesta en marcha de iniciativas destinadas a expandir las redes de recarga. Unas propuestas que están contando con el apoyo de la EU, que invertirá en una primera fase 800 millones de euros en ayudar a la instalación de estaciones de recarga.

Desde el sector privado parece que también hay un despertar de la fuerza, y como ejemplo podemos recordar iniciativas hasta ahora sólo en papeles, que se apresuran a convertirse en una realidad, como el proyecto IONITY, que supone el mayor consorcio de fabricantes de coches que apuestan por una amplia red de recarga. También el desembarco al mercado de empresas hasta ahora situadas en el polo opuesto, como son las petroleras, que han comenzado su desembarco en este mercado con la anglo-holandesa Shell a la cabeza.

Pero sin duda las más interesadas, y las que mayor potencial tienen, son las eléctricas. Gigantes dormidos que están viendo la vida pasar sin grande sobresaltos, pero que en algún momento tendrán que quitar el freno de mano e incorporarse a un mercado que claramente les beneficia. Una de las primeras en hacerlo ha sido la alemana E.ON, que ha confirmado la instalación de nada menos que 10.000 puntos de recarga rápida en los próximos años.

Un escenario donde se darán la mano una infraestructura cada vez más amplia, con una oferta de vehículos también cada vez más extensa y competitiva. Algo que debería dar como resultado unas cifras de ventas cada vez más numerosas, lo que debería tener como resultado una reducción paulatina en la demanda de coches con motor de combustión.

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Vía | ACEA

 

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