Sin duda ha sido toda una sorpresa la decisión del fabricante francés Renault de complementar la fabricación de sus coches eléctricos con la puesta en marcha de una gama de coches híbridos, tanto gasolina como diésel.
La decisión la ha anunciado durante el pasado Diesel Powertrain Congress celebrado en al localidad francesa de Rouen, donde se ha afirmado que el motor seleccionado para su electrificación parcial será el 1.5 diésel o el TCE 115 gasolina, que recibirán un pequeño motor eléctrico además de una batería, que funcionarán como un gran sistema de stop&start, apagando el motor de combustión en las paradas y recuperando la energía producida en las frenadas, todo para lograr alcanzar unas elevadas tasas de eficiencia en una gama ya de por si eficiente.
De momento no se sabe donde serán fabricados estos nuevos modelos, pero lo que si sabemos es que su producción arrancará a lo largo del 2017, una fecha algo lejana pero que nos indica que el grupo francés además de una decidida apuesta por los coches eléctricos, también quiere aprovechar su experiencia con este tipo de motores para meterse en la guerra de los híbridos, donde hasta el momento ha dominado Toyota y que ha visto como competidores como Citroën o Peugeot han lanzado sus modelos.
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Fuente | Usinenouvelle
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