Después de pasar los test del fabricante, el pequeño triciclo eléctrico Toyota i-Road comenzará a finales de este año las pruebas de campo reales.
A pesar de su aspecto de prototipo digno de una película de ciencia ficción, antes de terminar el año tanto japoneses como franceses podrán acceder a una pequeña flota que servirá como plataforma de pruebas que determinará el verdadero potencial de este micro urbano eléctrico.
Estas primeras pruebas tendrán lugar en Francia, donde 70 unidades del i-Road formarán parte de un programa de car sharing, o alquiler a corto plazo, que tendrá a la localidad de Grenoble como escenario. En esta localidad, la eléctrica EDF instalarán 20 estaciones de alquiler y recarga donde los interesados podrán acceder a una unidad de este modelo y pagar sólo por el tiempo de uso.
Como recordamos el i-Road es un monoplaza que cuenta con una cabina cerrada, de un tamaño de apenas 2.35 metros de largo y 850mm de ancho. Unas características que le permite estacionar en el espacio poco mayor que la de una moto, y gracias a un ángulo de giro mínimo de solo 3,0 metros, dispone de una capacidad de movimiento en entornos urbanos muy elevada.
Su velocidad máxima estará limitada a 50 km/h. algo hasta cierto punto lógico ya que su carácter es puramente urbano. La propulsión es totalmente eléctrica gracias a dos motores de para un total de 4 kW (5.4 CV) y que están alojados en las ruedas delanteras. La energía procede de una pequeña batería de litio, que le proporciona una autonomía de apenas 50 kilómetros con cada carga, una batería que podremos recargar por completo mediante un enchufe convencional en tres horas.
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