Después de Tesla, si tenemos que elegir un modelo comercial para los coches eléctricos seguramente seleccionaríamos a BMW como un ejemplo a seguir. El fabricante alemán ha optado por crear una marca diferenciada para sus modelos eléctricos, y además ha diseñado espacios propios en sus concesiones dedicados en exclusiva a estos modelos.
Parece que el tiempo le está dando la razón a BMW, ya que otras marcas alemanas se han fijado en este sistema y están dando pasos para replicarlo. Es el caso de Mercedes, que de mano del propio Ola Källenius, jefe de ventas y marketing, ha confirmado que la posibilidad de crear una denominación alternativa está sobre la mesa.
Una división dedicada a la venta de los coches eléctricos, que se separarían de esa forma a nivel de nombre y también físicamente de las variantes convencionales y la oferta en híbridos enchufables. Queda por saber si la oferta de coches impulsados por una pila de combustible de hidrógeno estará enmarcada dentro de esta marca, o por lo contrario ocuparán su lugar al lado de los híbridos enchufables.
Evidentemente para crear una división de coches eléctricos…es imprescindible contar con este tipo de coches entre tu oferta. Algo que ahora mismo no sucede, ya que Mercedes sólo dispone del Clase B ED, al que se unirán las dos versiones del Smart el próximo año.
No hay de momento planes para nuevos eléctricos, por lo tanto la creación de una división diferenciada tendrá que esperar unos años.
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Vía | Autocar
