La compra del 10% de Daimler por parte de los chinos de Geely puede suponer un impulso al proyecto de coches eléctricos de Mercedes
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Publicado: 26/02/2018 12:24
Esta pasada semana saltaba a todas las portadas el acuerdo de compra del 10% del grupo alemán Daimler por parte del chino Geely. Un movimiento realmente llamativo que convertía a los asiáticos en el mayor accionista del conglomerado que aglutina a marcas como Mercedes o Smart.
De esa forma Geely ampliaba sus dominios ya que es propietaria también de Volvo o la empresa de taxis de Londres. Y entre los motivos para la compra, el presidente del grupo, Li Shufu, ha indicado que el movimiento beneficiará ambas partes en un mercado que está cambiando de forma radical.
El Sr Shufu ha descrito el acuerdo como una visión estratégica, necesaria en un marco donde las empresas necesitan cooperar mediante este tipo de asociaciones y alianzas como la firmada, y que indican permitirá a Daimler convertirse en una empresa líder en el sector del coche eléctrico.
Y no será la única. Esta semana Daimler ha confirmado también el acuerdo con otro fabricante chino, BAIC, que recibirá 1.900 millones de dólares para modernizar una planta de producción que tendrá líneas de producción de coches eléctricos. Movimientos muy ambiciosos que tienen a China su epicentro, pero cuya influencia se notará en todo el mundo.
Opinión
Lo que para algunos ha supuesto una invasión china en toda regla, podría convertirse en un verdadero punto de inflexión para Daimler, que logra estrechar la colaboración con un importante socio. Sobre todo pensando en aprovechar las sinergias en merados como el de China, que a partir del próximo año exigirá cuotas de ventas de coches eléctricos. Un mercado donde hasta el momento Daimler a pesar de que ha dado pequeños pasos, está todavía lejos de alcanzar un importante volumen de producción. Algo que logrará acelerar gracias a la ayuda de Geely.
Esto supondrá contar con más medios y experiencia para poner en marcha suplan industrial para el coche eléctrico que supondrá la puesta en marcha de fábricas tanto de coches como de baterías en los principales mercados. Una producción cercana a la demanda, que además estará preparada para atender un incremento importante de ventas a corto plazo.
Mercedes contará con fábricas de coches eléctricos en los tres continentes, con plantas en Alemania, China y Estados Unidos, que se encargarán de la producción de la familia EQ, y también una planta en Francia encargada de fabricar los Smart. En los tres primeros casos además las líneas de producción de coches estarán acompañadas por la fabricación propia de baterías.
Vía | BBC