Mercedes-Benz nos muestra los EQC y GLC F-Cell durante sus pruebas de invierno

Mercedes-Benz no presentará su esperado EQC en el próximo Salón del Automóvil de Ginebra. A pesar de que el mercado del coche eléctrico premium está candente con el lanzamiento del Jaguar I-Pace, parece que la marca alemana quiere tomarse las cosas con calma, por lo que deberíamos esperar el lanzamiento de su SUV 100% para otoño de este año, durante el Salón de París.

Sin embargo, la marca ha querido ir abriendo boca con la publicación de una serie de imágenes en la que se nos muestran sus dos futuros modelos eléctricos de pruebas: tanto el ya mencionado EQC a baterías, como el GLC F-Cell, la apuesta de Daimler por la tecnología de la pila de combustible y futuro rival del Toyota Mirai y del Hyundai Nexo.

Los modelos, que ya son preseries, se encuentran de pruebas en el Círculo Polar Ártico, al norte de Suecia, paro probar tanto el rendimiento de los coches en temperaturas extremadamente frías (recordemos que las baterías de ion-litio sufren y pierden mucho rendimiento en estas situaciones) como el comportamiento de sus chasis en carreteras completamente nevadas.

La marca alemana no revela demasiados detalles de los modelos, más allá de confirmar que el desarrollo de ambos está prácticamente finalizado, y que ahora están simplemente afinando todos los elementos para que el resultado final sea el mejor posible. Del EQC en concreto destacan su potencia, su confort de marcha (potenciado por el silencio con el que rueda) y su buen comportamiento dinámico.

El Mercedes EQC será rival directo del Jaguar I-Pace cuando salga al mercado. Con unas dimensiones muy similares, el modelo germano tendrá sin embargo una estética mucho más conservadora que el inglés, mucho más optimizado a nivel aerodinámico.

Si bien todavía no está confirmado, se rumorea que la batería que montará el modelo será de 75 kWh. Una cifra que se quedará algo corta a la hora de competir contra el I-Pace y sus 90 kWh, pero que sin embargo supone igualar la capacidad del Tesla Model X 75D. Por lo tanto, su autonomía final dependerá de la eficiencia que Mercedes haya conseguido en su grupo propulsor.

Fuente | Mercedes-Benz