Polestar es una marca recientemente independizada de Volvo. Si bien todavía pertenece al grupo Geely-Volvo, ha dejado de ser el preparador oficial de la marca sueca para erigirse como una entidad propia: un fabricante de coches eléctricos de carácter premium y deportivo. El primer modelo de esta nueva marca es el Polestar 1, que fue presentado hace ya unos meses.
El Polestar 1 es un coupe de cuatro plazas con un diseño fuertemente inspirado en el Volvo S90. Originalmente iba a ser un modelo de Volvo (probablemente bajo la denominación C60 o C90), pero finalmente se decidió aprovechar su diseño para crear el primer vehículo de Polestar. Así, su planteamiento cambió por completo, pasando de un coupe mediano como un Audi A5 a un superdeportivo de altos vuelos.
El Polestar 1 se fabricará en China con cuentagotas, siendo un modelo muy exclusivo. A pesar de estar basado en la plataforma SPA de Volvo, está profundamente modificada. Así, el vehículo cuenta con una potencia de 600 cv y una estructura hecha integralmente en fibra de carbono. El modelo es un PHEV, y según el ciclo NEDC, es capaz de recorrer 150 km por carga en modo 100% eléctrico (en condiciones reales serán unos 90 km).
Este será probablemente el primer y último híbrido de Polestar, pues los futuros Polestar 2 y 3 (un sedán del segmento D y un SUV de gran tamaño respectivamente) serán modelos 100% eléctricos desarrollados para competir contra los Tesla Model 3 y Model X. A pesar de su apuesta por la exclusividad, su diseño demasiado ligado con Volvo podría lastar la imagen del buque insignia de Polestar.
A pesar de esto, la marca acaba de anunciar el sorprendente precio de su vehículo: desde 155.000 euros, una cifra a la altura de los fabricantes más caros y exclusivos de la industria. A pesar de las innegables cualidades del Polestar 1, ¿tendrá éxito un modelo tan caro con unos rasgos tan similares a un Volvo mucho más barato?
Fuente | New Atlas
