Esta semana ha comenzado sin mucho ruido la distribución del nuevo Jaguar i-Pace. El primer coche eléctrico del fabricante británico que además se convierte en la primera alternativa dentro del segmento de los todocaminos premium a Tesla.
Una de sus primeras paradas ha sido Francia. Allí el mes de abril no ha sido un mes de muchas ventas, casi la mitad del espectacular mes de marzo, pero mantienen su crecimiento respecto al pasado año. Pero sin duda uno de los titulares es precisamente el inicio de las entregas del Jaguar i-Pace en este mercado, que es el primero del que tenemos referencias.
En abril el i-Pace ha logrado entregar un total de 20 unidades, las primeras de su vida. Por su parte el Tesla Model X ha conseguido llegar a las 14 matriculaciones. Por lo tanto, una victoria simbólica del Jaguar en su estreno. Algo que servirá a este modelo para lograr algo de publicidad extra debido a todo lo que arrastra lo relacionado con Tesla, sobre todo las noticias negativas.
Por supuesto hablamos de una muestra muy pequeña. Un mes no es muy representativo, y menos en un mercado el de Francia donde las ventas de coches eléctricos se centran casi en exclusiva en un único modelo, el Renault ZOE, que en abril ha llegado a las 961 entregas. Incluso el nuevo Nissan LEAF se ha quedado muy lejos en su estreno, con unas matriculaciones de 375 unidades.
Pero sin duda la buena noticia es que el i-Pace ya está a la venta, y no es un simple prototipo de muestra para los salones del automóvil. Un primer paso imprescindible que ahora debe confirmarse con un ritmo de producción acorde a la demanda. Y es que ya no es la primera vez que vemos un coche eléctrico competitivo y deseado, pero que su fabricante se ve incapaz de producir en masa por culpa de la falta de componentes, como las baterías.
Un modelo que nos propone algo diferente al Model X, aunque se quieran comparar. Es bastante más pequeño, 35 centímetros más corto, lo que para algunos puede ser una ventaja a la hora de maniobrar y estacionar. Es más rápido en cuanto a aceleración, si exceptuamos la versión Performance del Tesla, y es algo más económico ya que parte desde 79.100 euros por los desde 92.500 euros del Model X75D.
Queda por ver el tema de las calidades y acabados, que en el caso de Jaguar es de esperar sean elevadas como nos tienen acostumbrados. En el pero tal vez añadir que el i-Pace llega sin un sistema de conducción autopilotado, y su recarga está limitada a 100 kW por lo que no podrá aprovechar las nuevas redes de 150 kW, y mucho menos las futuras de 350 kW.
Vía | AVERE
