Noruega inicia la fase de pruebas de sus vuelos con aviones eléctricos
4 min. lectura
Publicado: 18/06/2018 09:00
Después de conquistar la tierra, ahora Noruega aspira a convertirse en pioneros en el sector de los vuelos con aviones eléctricos. Y es que hoy mismo se realizará el primer trayecto de pruebas de la que será la primera línea comercial que completará sus trayectos con electricidad.
Este primer viaje partirá desde el aeropuerto de Oslo contará con un invitado con el Ministro noruego de Transporte, Ketil Solvik-Olsen Un momento que dará pistoletazo de salida a los test con aviones comerciales que se encargarán de cubrir las rutas locales. El propio ministro ha comentado hace unas semanas: «Mucha gente dice que debemos olvidarnos del transporte aéreo porque nunca podremos lidiar con las emisiones y el ruido, pero ese es un enfoque anticuado“.
Por su parte el presidente de la aerolínea Wideroe ha indicado que en la actualidad los vuelos regionales están usando tecnología de los años 70. Según el Sr. Stein Nilsen «Hemos visto muchos avances en la aviación, pero no en los aviones más pequeños que todavía utilizan sistemas con más de 30 años de desarrollo.
La encargada del desarrollo del primer modelo de pruebas ha sido la eslovena Pipistrel. Una pequeña compañía que desarrolla modelos de pequeño tamaño destinados principalmente para las escuelas de vuelo. Pero detrás hay en marcha un fuerte desarrollo de los gigantes como Uber, Google o Airbus, que preparan propuestas de mayor tamaño y alcance.
Según Dag Falk-Petersen, director del operador público de aeropuertos de Noruega, Avinor: «En mi opinión, no hay dudas: para el año 2040 Noruega operará al completo con aviones eléctricos. El calentamiento global se ve muy afectado por el transporte aéreo, estimándose su impacto en un 5% por las emisiones de CO2 y otras sustancias, incluidos óxidos de nitrógeno.»
Por su parte Ivo Boscarol, director ejecutivo de Pipistrel: “Con el coste cada vez mayor del combustible, es hora de reconsiderar las aeronaves eléctricas. Las tecnologías desarrolladas especialmente para nuestro avión redujeron el coste del entrenamiento de piloto en hasta un 70%, lo que hace que volar sea más asequible que nunca”.
Y es que el coste operativo es extremadamente bajo. Por ejemplo los modelos de entrenamiento de la propia Pipistrel ofrecen un coste de menos de 3 dólares por un vuelo de una hora, y además la batería se puede cargar con bastante rapidez gracias a su pequeño tamaño, 20 kWh, o puede cambiarse por otra que ya esté cargada.
Además los aviones eléctricos ayudarán a acercarse a los objetivos de reducción de emisiones de Europa, establecido en un 40% para 2030. Algo a lo que ayudará la expansión de las ventas de coches eléctricos, pero donde también pueden jugar un papel muy importante la sustitución de aviones que funcionan con combustibles líquidos por modelos eléctricos. Algo donde como vemos, Noruega quiere convertirse en pioneros.
Vía | BS