El Tesla Model 3 es un modelo muy esperado por numerosos compradores. Con una lista de espera realmente larga producto de tener más de 400.000 reservas, son muchos los que hasta pasados dos o tres años desde que realizaron su pedido no podrán disfrutar de su coche. Si a esto le unimos la alta expectación levantada a nivel mundial por el modelo más económico de la marca californiana, tenemos como resultado un coche muy deseado por los consumidores.
No es para menos: este modelo tiene un precio similar al de sus alternativas de combustión (los sedanes del segmento D premium como Audi A4, BMW Serie 3, Mercedes-Benz Clase C…), cosa de la que no pueden presumir la mayoría de coches eléctricos del mercado, que tienen un precio de partida superior al de sus equivalentes térmicos.
Además, ofrece unas prestaciones realmente buenas: la versión Long Range RWD consigue una autonomía de 537 km bajo el ciclo de homologación EPA, muy realista. Las versiones Long Range Dual Motor y Dual Motor Performance logran una autonomía de 495 km EPA (si bien los tres modelos, RWD, Dual Motor y Performance se anuncian con una autonomía unificada de 499 km EPA), y son capaces de hacer el 0 a 60 millas por hora (0-96,5 km/h) en 4,5 segundos y 3,5 segundos respectivamente.
Tampoco hay que olvidar otras características de gran interés del coche: su chasis tiene una puesta a punto alabada por todos los medios que garantiza un buen comportamiento dinámico, mientras que a nivel de equipamiento hay que destacar el Autopilot, que es actualmente el sistema de conducción autónoma más avanzado del mercado (sin contar sistemas no comerciales como el de Waymo), así como las constantes actualizaciones OTA.
Sin embargo, lo cierto es que en numerosas pruebas y reviews de propietarios suele haber una nota discordante: la calidad de acabados. Son muchos los que dicen que los ajustes del Model 3, los acabados de la pintura o el tratamiento de algunas zonas no son todo lo buenos que debieran.
A pesar de ello, y de acuerdo con una publicación de Forbes, la inmensa mayoría de compradores se muestran muy satisfechos con su compra a pesar de estos problemas de calidad. Además, también se señala que las unidades fabricadas a partir de enero tienen una calidad de acabados superior.
A lo largo de los últimos meses, Tesla ha mejorado tanto los ajustes de la carrocería como los procesos de pintado, y ha actualizado los coches para pulir algunos defectos de salida (unas nuevas suspensiones menos secas, un asiento trasero mejor diseñado y más cómodo, un nuevo parabrisas para disminuir el ruido aerodinámico, una actualización para reducir la distancia de frenado a alta velocidad…).
Dicho de otra forma, el Tesla Model 3 es un coche con una concepción revolucionaria que enamora a sus propietarios, a pesar de que algunos defectos de calidad producto de los problemas con la producción empañan el conjunto.
Fuente | Forbes
