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Presentada oficialmente la Smart Classic, la moto eléctrica con 160 kilómetros de autonomía

El mercado de la motocicleta eléctrica está menos desarrollado que el de los vehículos de cuatro ruedas, así que cualquier noticia referida a este sector siempre es una buena noticia. De hecho, las motos eléctricas podrían ser la solución más idónea para los congestionados centros de las grandes ciudades: se mueven con energías limpias, ocupan mucho menos que un coche y tienen mucha mayor facilidad de aparcamiento.

En las ciudades más importantes de nuestro país se están extendiendo con grán éxito las motos impulsadas por energía eléctrica, la inmensa mayoría de ellas pertenecientes a flotas de servicios de alquiler por minutos. Pero por desgracia, la oferta de estos vehículos para particulares es algo más limitada. Sin embargo, en Estados Unidos este fenómeno parece que causa mayor interés y la oferta es algo más variada.

La empresa Fly Free Smart ya presentó hace un tiempo la Smart Dessert, su primer modelo de motocicleta eléctrica. Ahora, esta compañía ha dado a conocer su segundo modelo, la Smart Classic, una moto eléctrica de aspecto retro con prestaciones similares a su hermana de gama, solo que la Classic está enfocada a un uso más urbano que la Dessert.

Esta motocicleta cuenta con un motor con una potencia nominal de 3kW, aunque es posible que pueda ofrecer casi el doble de potencia máxima. La velocidad máxima anunciada para la Classic es de 80 km/h, lo que la convierte en un vehículo perfecto para la ciudad. Debajo del falso tanque de combustible se encuentran una o dos baterías fabricadas por LG, las cuales ofrecen una autonomía dependiendo de la cantidad que monte, de entre 80 y 160 kilómetros. Además, esta segunda batería permite a la Classic alcanzar la velocidad máxima anunciada, ya que si solo monta una, esta se reduce hasta los 64 km/h.

En el cuadro de mandos destaca la gran pantalla circular donde se muestra la velocidad, el nivel de carga de la batería, los kilómetros recorridos y datos como la temperatura del motor. Además, se incluye adosado al manillar una toma USB para la carga de un dispositivo móvil. En el falso depósito de combustible se encuentra la toma de carga, disimulada como el tapón de llenado del tanque, junto al botón de encendido sin llave.

En el exterior, tanto el faro delantero como el piloto trasero son de tecnología LED, aspecto que contrasta con los manillares situados bajos que equipan en los extremos los espejos retrovisores, al estilo de las clásicas motos de carretera de los años 50. Entre las opciones disponibles se ofrece una serie de opciones de color personalizables y una aplicación compatible tanto con Android como con iOs para establecer una mayor conectividad entre la motocicleta y el usuario.

El precio de salida es de 6.399 dólares, aproximadamente unos 5.660 €, cuyos pedidos, planeados por la compañía a finales de este año, se han tenido que ver demorados por diversos retrasos hasta marzo de 2019. Para compensar esta medida, la marca ha anunciado que los primeros pedidos anticipados obtendrán un descuento de entre el 35 y el 40% según el modelo y los accesorios elegidos.

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